Reconocer los fallos operativos
Recientemente, los Mossos d’Esquadra han admitido que hubo ‘errores’ significativos en su estrategia para interceptar a Carles Puigdemont durante su regreso a Catalunya el pasado 8 de agosto. Estas revelaciones surgen de un informe enviado al Tribunal Supremo, en el que se detallan diversas carencias en la planificación de la operativa.
Una estrategia de seguimiento defectuosa
El informe, solicitado por el juez Pablo Llarena, indica que los agentes no consideraron la posibilidad de que Puigdemont pudiera abandonar el país de nuevo. Además, se detectó que el dron encargado de supervisar su llegada perdió el foco en el momento más crucial, justo antes de que el líder de Junts volviera a Waterloo.
Falta de previsión
Los Mossos esperaban que Puigdemont, después de siete años de exilio, volviera para participar en un lleno de investidura, sin prever un posible escenario de fuga. Esto provocó que no se realizaran las medidas adecuadas para asegurar su detención.
Circunstancias inesperadas
El informe destaca que las condiciones del momento no eran las previstas. Por ejemplo, la asistencia del presidente del Parlament, Josep Rull, a la situación no fue debidamente controlada. Los agentes no pudieron inspeccionar el Parlamento hasta las primeras horas del día 8, lo que limitó su capacidad de acción.
El momento clave
Durante su discurso, que tuvo lugar entre las 9:03 y las 9:10, el dron dejó de seguir a Puigdemont, momento en el que éste accedió a una zona restringida. Las imágenes muestran que, en el momento en que desapareció de la vista, se produjeron movimientos coordinados que facilitaron su fuga.
Una maniobra ben planificada
Los Mossos d’Esquadra han reconocido que cayeron en una ‘trampa muy bien diseñada’, ya que todos los agentes, excepto uno, estaban centrados en la comitiva de Junts, creyendo que Puigdemont se encontraba entre ellos. La frase del líder independentista sobre una ‘sesión importante’ fue interpretada como un indicio que se dirigía al Parlament.
Reflexiones sobre el futuro
Este episodio pone de manifiesto la necesidad de una revisión exhaustiva de los protocolos de seguridad y seguimiento en futuras operativas. La capacidad de adaptarse a situaciones imprevistas es fundamental para garantizar que incidentes como éste no se repitan. La reflexión sobre estos errores operativos podría ser clave para mejorar las actuaciones policiales en Cataluña.