El Endurecimiento de las Restricciones
Desde agosto de 2021, Afganistán ha entrado en una nueva era de control y represión bajo el régimen talibán, que ha aprobado recientemente una legislación que restringe aún más las libertades de las mujeres. La ley, conocida como Ley para la Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio, impone normativas severas sobre la forma en que las mujeres deben comportarse en espacios públicos, prohibiendo incluso que sus voces sean escuchadas.
Voces Silenciadas y Vestimenta Obligatoria
Uno de los aspectos más controvertidos de esta normativa es la consideración de la voz femenina como ‘íntima’, que no puede ser escuchada en público. Esto incluye prohibiciones que van desde el canto hasta la lectura en voz alta. Además, las mujeres están obligadas a cubrirse completamente la cara con el velo, una medida que, según el gobierno talibán, busca evitar tentaciones y distracciones.
Un Control Total sobre la Vida Quotidiana
La ley, que consta de 35 artículos, no sólo regula la vestimenta de las mujeres, sino que también establece normas para los hombres, incluyendo prohibiciones sobre la forma de vestir. Los hombres no pueden llevar corbatas, ni recortarse la barba por debajo de una determinada longitud. Así, se establece un control total sobre la apariencia y comportamiento de toda la sociedad.
El Impacto en la Educación y la Vida Laboral
Desde su regreso al poder, los talibanes han ido eliminando los derechos de las mujeres, prohibiendo el acceso a la educación tanto en escuelas como en universidades. La posibilidad de trabajar en cualquier sector, ya sea público o privado, se ha convertido en un sueño inalcanzable para muchas mujeres afganas.
La Aplicación de la Ley: Un Mecanismo de Control
El Ministerio para la Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio es el encargado de hacer cumplir esta nueva normativa. Según su portavoz, el ministerio no sólo busca mantener la moralidad pública, sino que también se encarga de prevenir prejuicios étnicos y regionales. Las sanciones por incumplimiento pueden variar desde simples advertencias hasta detenciones de hasta tres días.
Un contexto de limitaciones globales
Esta ley no sólo refleja la ideología de los talibanes, sino que también plantea preocupaciones sobre el respeto a los derechos humanos a nivel global. Su estricta aplicación marca un retroceso en los avances conseguidos en materia de derechos de las mujeres, provocando una reacción negativa entre la comunidad internacional.
La Reacción Internacional y el Futuro
La comunidad internacional observa con preocupación cómo las autoridades talibanes implementan medidas que parecen desmarcarse de los avances en derechos humanos que se habían logrado en el pasado. La cuestión que se plantea es cómo reaccionarán los estados y organizaciones internacionales ante estas acciones que atentan contra la dignidad y los derechos de las mujeres afganas.