El queso, un producto con mucha historia y diversidad
El queso es uno de los alimentos más antiguos y variados que existen. Hay miles de tipos de quesos, cada uno con su origen, su elaboración, su sabor y su textura. Para apreciar toda la riqueza y la complejidad del queso, es necesario saber cómo probarlo de forma adecuada, como si fuéramos unos verdaderos expertos. Así podremos disfrutar más de su consumo y también impresionar a nuestros amigos o familiares con nuestros conocimientos.
Los pasos para realizar una buena cata de queso
Esta semana, Xevi Miró, copropietario de la quesería Llet Crua, nos explica cómo hacer una cata de queso como un auténtico profesional. Según él, hay tres fases que debemos seguir: la visual, la olfativa y la gustativa. A continuación, le detallamos cada una de ellas.
La fase visual
Lo primero que debemos hacer es observar el queso con atención. Debemos fijarnos en la corteza, que es la parte exterior del queso, y ver qué aspecto tiene. La corteza puede dar pistas sobre el proceso de elaboración y maduración del queso, así como sobre su grado de fermentación. Luego debemos mirar el interior del queso y ver si la corteza está bien adherida a la pasta, que es la parte interior. También debemos valorar si la pasta tiene una distribución homogénea o si presenta agujeros, ojos o fisuras. Por último, debemos comprobar la textura del queso, si es blanda, cremosa, dura o granulosa.
La fase olfativa
Lo segundo que debemos hacer es oler el queso con cuidado. Debemos ponernos el queso a cierta distancia de la nariz e ir acercando progresivamente. En algún momento, notaremos que el queso nos impacta el olfato y nos despierta sensaciones. Debemos distinguir si el olor de la corteza es diferente al de la pasta, y si ésta varía según la zona del queso. También podemos cortar una porción del queso y oler el trozo, ya que quizás allí el olor es más intenso por haberlo manipulado.
La fase gustativa
Lo tercero y último que debemos hacer es probar el queso con placer. Debemos ponernos el queso en la boca y dejar que se funde con la saliva. Debemos buscar si el queso tiene un buen equilibrio entre los cinco gustos básicos: ácido, amargo, salado, dulce y umami. También debemos percibir los aromas que nos llegan por la vía retronasal, es decir, por la nariz, puesto que son los que nos dan el sabor del queso. Además, debemos tener en cuenta la textura, si es suave, crujiente, fibrosa o untuosa.
En resumen, la cata del queso es una experiencia sensorial que nos permite apreciar todos los matices y la calidad de este delicioso producto. Como dice Xevi Miró, la combinación de todas las características es lo que determina si la cata del queso es correcta o no. Así que ya sabe, si desea hacer una cata de queso como un experto, siga estos consejos y disfruta del momento.