Introducción
Hoy, en el Día de la Mujer, queremos recordar a una de las grandes pintoras y artistas catalanas del siglo XX, Maria Girona y Benet. Su obra pictórica y su participación en movimientos artísticos han dejado un importante legado en la cultura catalana.
Una vida dedicada al arte
Maria Girona nació en 1923 en Barcelona. Estudió en París y viajó por Bélgica, Holanda e Inglaterra para profundizar en su formación artística. Fue influenciada por la obra del artista Henri Matisse y desarrolló un estilo pictórico propio, caracterizado por paisajes cromáticos, naturalezas muertas y retratos.
Durante su carrera, Maria Girona participó en movimientos artísticos como la Escola EINA, el grupo de Els Vuit y Estampa Popular. También colaboró con su marido, Albert Ràfols-Camada, quien también era pintor y artista. Junto a él, tuvo una presencia e influencia destacada en la vida cultural de Cataluña durante el siglo XX.
Un matrimonio comprometido
Maria Girona y Albert Ràfols-Camada fueron un matrimonio irrepetible en la historia del arte catalán. Fueron reconocidos por su participación en movimientos sociales y políticos. Tomaron parte en el famoso cerrado en el monasterio de Montserrat en 1970 y realizaron un mural a favor de la libertad de expresión en las Cotxeres de Sants siete años después.
A pesar de su estrecha relación con Ràfols-Camada, Maria Girona siempre destacó por su propia voz artística. Fue una artista con gran personalidad y contribuyó al grupo Els Vuit, junto con otros artistas como Miquel Gusils, Joan Palà, Ricardo Lorenzo, Vicenç Rossell y el músico Joan Comellas.
Un legado artístico
Maria Girona dejó un importante legado artístico, con obras que reflejan su visión personal del mundo. Destacan sus paisajes e interiores de Barcelona, Cadaqués, Capellades y Calaceite. Su obra ha sido reconocida y valorada, y recibió la Creu de Sant Jordi en 1998.
Aunque Maria Girona murió hace nueve años, su legado perdura y sigue siendo una fuente de inspiración para nuevos artistas. Su contribución al arte catalán y su influencia en la cultura del país no pueden olvidarse.
