La salut pública a l’examen
La situación de la salud pública española ha sufrido una disminución significativa en los últimos años. Las listas de espera han aumentado de manera alarmante, de 592,000 pacientes que esperan una operación no urgente en 2017 a 848,340 en junio de 2024. Esto revela una tendencia preocupante en el acceso a la salud, con un tiempo de espera promedio que ha superado los 100 días.
Aunque la inversión en salud ha aumentado, la creciente demanda, impulsada por Covid-19 y el envejecimiento de la población, ha aprobado la oferta. Esto ha llevado a un aumento de las quejas relacionadas con la falta de personal y la saturación de los servicios de emergencia.
Educación: una tendencia preocupante
Los últimos informes de PISA indican que la educación en España no ha experimentado las mejoras esperadas. Los resultados en la ciencia cayeron de 493 puntos en 2015 a 485 en 2022, con una tendencia similar en matemáticas y lectura. España permanece por debajo del promedio de la OCDE, lo que refleja un estancamiento en el rendimiento académico de los estudiantes.
Mejoras en el sistema de dependencia
A diferencia de otros sectores, el sistema de dependencia ha visto mejoras significativas. El número de personas con derecho a ayudar pero sin provisión ha disminuido considerablemente, de 385,000 a 2015 a 135,400 a 2024. Este cambio es el resultado de políticas públicas y un aumento en la financiación estatal.
Transporte: avances y desafíos
España ha avanzado en la infraestructura de transporte, convirtiéndose en el segundo país con más kilómetros de alta velocidad ferroviaria. Sin embargo, los servicios de transporte público todavía tienen deficiencias, con quejas sobre la falta de mantenimiento y desgloses frecuentes, especialmente en las redes de cercanías.
Administración pública: un laberinto burocrático
La administración pública ha sido criticada por su ineficiencia. A pesar de las mejoras digitales, la necesidad de cita ha complicado los procedimientos, generando frustración entre los ciudadanos. La burocracia sigue siendo un obstáculo, y muchos sienten que el sistema no ha evolucionado correctamente.
Seguridad ciudadana: un panorama mixto
España sigue siendo uno de los países más seguros de Europa, con tasas de homicidios relativamente bajas. Sin embargo, los delitos sexuales han experimentado un aumento alarmante, con un aumento significativo en las violaciones. Estos datos muestran la necesidad de abordar este problema social con urgencia.
Aunque la población carcelaria ha disminuido, el sentimiento de seguridad ciudadana es bueno, con una percepción generalizada de que España es un lugar seguro. Sin embargo, han surgido los nuevos desafíos como los ciberdelincuentes, lo que refleja la necesidad de adaptar las medidas de seguridad a un mundo en constante cambio.