La realidad de las personas sin hogar en Barcelona
Según el recuento anual de la Red de Atención a Personas Sin Hogar, se calcula que en la ciudad de Barcelona hay cerca de 5.000 personas sin hogar, de las que 1.284 duermen en la calle a diario. Estas cifras ponen de manifiesto la cronificación de la pobreza en Cataluña, tal y como lo evidencian varios estudios.
De estas personas atendidas, un 6% tiene menos de 25 años y casi el 90% son de nacionalidad extranjera. Esto refleja la diversidad de perfiles y procedencias de aquellas personas que se encuentran en esa situación.
La atención a las personas sin hogar
A pesar de las cifras alarmantes, hay que tener en cuenta que existe un grueso importante de personas sin hogar que son difícilmente detectables y no acceden a los recursos públicos de protección social. Entidades como la parroquia de Santa Ana de Barcelona han ampliado su actividad para atender a estas necesidades, ofreciendo comidas, atención psicológica y ropa a las personas sin hogar.
Además, la Facultad de Educación Social y Trabajo Social Pere Tarrés-Universitat Ramon Llull colabora con la Asociación Mensajeros de la Paz Cataluña para sumar la perspectiva de la investigación a este programa de ayuda social. Mediante un convenio firmado entre ambas entidades, investigadores de la Facultad elaborarán informes que evaluarán la realidad de las más de 2.500 personas sin hogar atendidas anualmente en el Hospital de Campaña Santa Anna. Estos informes permitirán conocer mejor los perfiles, trayectorias vitales y migratorias de estas personas, con el objetivo de detectar los factores de riesgo y de protección que influyen en su situación.
Una labor de investigación con impacto social
Esta colaboración entre la Universidad y la asociación tiene como finalidad dar rigor a las intervenciones que se realizan en Santa Ana a través de la investigación. Los informes generados serán un observatorio privilegiado para comprender mejor la realidad del sinhogarismo y las contradicciones del mundo actual. Además, se pretende desarrollar trabajos más específicos que pongan el foco en las necesidades y potencialidades de las personas jóvenes atendidas en Santa Anna.
Así pues, esta iniciativa no sólo busca aportar conocimiento y comprensión, sino también mejorar las intervenciones y la atención a las personas sin hogar. Con esta colaboración, se pretende generar un impacto social positivo y contribuir a la lucha contra el sinhogarismo en Barcelona.