Recepción fría de la prórroga del Plan Moves III
La decisión del Gobierno de prorrogar el Plan Moves III de incentivos para la compra de vehículos eléctricos ha sido recibida con cierta frialdad por los agentes implicados. Aunque se esperaba un mayor impulso por parte del Gobierno para fomentar la electrificación de la movilidad en España, algunos agentes consideran que las ayudas no son tan eficaces como se esperaba.
La dimisión de Wayne Griffiths como presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones, debido a la falta de empuje del Gobierno en la electrificación de la movilidad, ha generado preocupación entre los agentes del sector. Sin embargo, compañías eléctricas como Chippio, que ofrecen servicios específicos para vehículos eléctricos, siguen considerando que aunque las ayudas no son perfectas, es positivo que se siga fomentando la transición hacia la electrificación.
Implicaciones de la prórroga
La prórroga del Plan Moves III extiende hasta el 31 de diciembre de este año las ayudas para la compra de vehículos eléctricos. Según el plan, aquellos que adquieran un coche eléctrico o híbrido enchufable con más de 90 kilómetros de autonomía podrán beneficiarse de descuentos de hasta 7.000 euros, siempre y cuando el precio del vehículo no supere los 45.000 euros (53.000 euros en caso de tener ocho plazas). Para los modelos híbridos enchufables con una autonomía de entre 30 y 90 kilómetros, la ayuda llega hasta los 5.000 euros, con un precio máximo de 45.000 euros.
Sin embargo, existe un problema que persiste: los compradores aún deben declarar la compra en el ejercicio correspondiente del IRPF, lo que reduce el ahorro real obtenido. Aunque se mantiene la desgravación del 15% en caso de compra de un automóvil elegible para las ayudas, con un límite de 3.000 euros, hasta finales de año.
Interés en los vehículos eléctricos
A pesar de las críticas y limitaciones del Plan Moves III, los vehículos eléctricos siguen generando interés en España. Según una encuesta realizada por Chippio, el 40% de los españoles considera la posibilidad de comprar un vehículo eléctrico en los próximos tres años.
El rango de edad más común entre los propietarios de vehículos eléctricos es de 34 a 44 años, mientras que entre los propietarios de vehículos de combustión hay un empate técnico entre los conductores de 45 a 54 años y los mayores de 65 años, representando casi una cuarta parte del total cada grupo.
Las principales barreras para dar el paso hacia los vehículos eléctricos son la falta de puntos de recarga (46%) y el precio de la energía (36%). Otros obstáculos incluyen el deterioro progresivo de las baterías y el precio de los vehículos. Sin embargo, una ventaja es que el costo de la energía eléctrica ha disminuido en los últimos meses, a diferencia de los combustibles fósiles.
