Una profunda revelación en momentos críticos
En el quinto domingo de Pascua, encontramos un texto que, a pesar de ser breve, está cargado de significado y originalidad. Jesús, en un momento crucial, anticipa la traición de Judas y presenta un ‘nuevo mandamiento’, que se destaca por su estructura única, centrada en la expresión ‘Te doy’. Esta elección de palabras generalmente no es respetada por los traductores, lo que enriquece su profundidad.
El contexto de la traición
La glorificación del hijo del hombre coincide con una de las situaciones más tensas de su interacción con los Doce. Al anunciar que «uno de ustedes me traicionará», Jesús causa una reacción inmediata a Simon Peter, quien busca aclaraciones del amado discípulo. Sin embargo, ni Jesús ni este discípulo revelan al traidor, evitando así un posible conflicto violento.
La comparación con los líderes judíos
En su discurso, Jesús es igual a sus discípulos con los líderes judíos que tienen la intención de detenerlo, advirtiendo: «A donde voy, no puedes venir». Esta declaración destaca la distancia entre su mensaje de amor y la violencia con la que sus oponentes quieren resolver conflictos.
La esencia del amor como solución
El camino que Jesús propone se basa en el amor del prójimo, una instrucción que, aunque no es nueva, ejemplifica a través de sus acciones. En un momento clave, Jesús afirma: «En esto, todos sabrán que ustedes son mis discípulos, si se calcula con usted». Esta declaración establece un nuevo estándar para la comunidad de creyentes.
Un mandamiento que trasciende
El nuevo mandamiento que desarrolla Jesús se especificará en un mensaje aún más poderoso: «A los demás, como los he amado». Este mandato, que incluye sacrificio en el otro, enfatiza la profundidad del amor que espera de sus discípulos y revela su obsesión con esta idea a partir de ahora.
Una visión que necesita comprensión
A pesar de la claridad del mensaje, tanto los doce y los líderes judíos parecen no entender completamente el propósito de Jesús. Su insistencia en el amor como el eje central de su enseñanza representa un desafío que continúa resonando hoy, invitándonos a reflexionar sobre la forma en que vivimos nuestras relaciones.