La Nueva Imagen de Paloma Rocasolano en Madrid
Desde que Letizia ascendió al trono junto a Felipe VI, Paloma Rocasolano, la enfermera jubilada, ha adoptado un estilo de vida que refleja su conexión con la realeza. Ha dejado atrás la humildad que la caracterizaba, mostrándose como la madre de la reina de España para obtener beneficios y un trato preferencial.
Antes, solía pasar sus veranos en Benidorm, llevando consigo su sombrilla, nevera y silla plegable para disfrutar de la playa desde temprano. Sin embargo, esos días han quedado atrás, y ahora su vida ha experimentado un cambio notable, que no pasa desapercibido para los ciudadanos.
Un Nuevo Estilo de Vida
Paloma Rocasolano ha abandonado su modesto piso de 37 metros cuadrados en el centro de la ciudad, optando por una residencia mucho más amplia y lujosa, donde ahora comparte su vida con Marcus Brandler, un empresario nigeriano.
Frecuenta las exclusivas tiendas del barrio de Salamanca, conocido como la Milla de Oro de Madrid, y disfruta de la alta gastronomía en los restaurantes de moda de la capital. Además, recibe numerosas invitaciones y asiste a eventos de moda, donde no duda en llevarse ropa sin costo alguno.
Transformación Física y Estética
El cambio físico de Paloma Rocasolano ha sido objeto de atención, especialmente después de su participación en los últimos Premios Princesa de Asturias. Su apariencia ha generado opiniones divididas, con algunos elogiando su atractivo y otros cuestionando si ha ido demasiado lejos.
Se ha sometido a tratamientos estéticos similares a los de su hija, Letizia, incluyendo la eliminación de líneas de expresión y realce de pómulos. Se rumorea que ha recurrido a diversas técnicas, como inyecciones de vitaminas, ácido hialurónico y hilos tensores, logrando un aspecto rejuvenecido y pulido.
Su piel luce radiante gracias a sesiones de CO2 de última generación, que incluyen técnicas de resurfacing, cool peel y lifting, proporcionando un aspecto rejuvenecido y fresco.
