La Tradición de las Monas de Pascua
Se acerca el Lunes de Pascua y los escaparates de las pastelerías de Sant Feliu se preparan para una festividad llena de tradición y dulces. Las monas de Pascua, un regalo clásico del padrino o madrina al ahijado, se han convertido en una parte indispensable de las celebraciones pasqueras. Esta tarta, originalmente hecha a partir de un bollo dulce y decorada con huevos duros, ha visto una evolución significativa en los últimos años.
La Evolución de las Monas
La introducción del chocolate en las monas de Pascua ha transformado esta tradición. Las monas de chocolate, ya sean en forma de huevos, figuras o estructuras, se han convertido en las favoritas del mercado. Este cambio ha sido tan significativo que ahora, numerosas monas de Pascua están hechas íntegramente de chocolate, ofreciendo una variedad de formas y sabores que cautivan la atención de los consumidores.
Tendencias Actuales
En una investigación realizada en diferentes establecimientos de Sant Feliu, se ha constatado que las monas tradicionales siguen siendo populares, aunque se ha observado un aumento en la demanda de las monas de chocolate, especialmente aquellas con dibujos de personajes como Pokémon y Dragon Ball. Además, las monas del personaje de manga y anime Dragon Ball han sido una revelación de este año, así como las monas de la perra Bluey, que han experimentado un notable incremento de ventas.
Preferencias de los Santfeliuenses
En una encuesta entre los santfeliuenses, se ha revelado que mientras algunas personas han cambiado a las monas de chocolate por su novedad y diversidad, otras siguen prefiriendo las monas tradicionales, haciendo especial mención a las monas de mantequilla con huevos de chocolate. Además, algunos ciudadanos optan por elaborar sus propias monas caseras, destacando la flexibilidad y la economía que ello conlleva.
Diversidad de Preferencias
Las preferencias de los santfeliuenses varían desde las monas de fútbol del Barça hasta figuras de chocolate como huevos grandes, gallinas o polluelos por compartir. Esta diversidad refleja la riqueza de las opciones disponibles y la capacidad de los consumidores para elegir monas que se ajusten a sus gustos y tradiciones familiares.