Un moment peculiar
Durante el segundo programa de Ni que fuéramos, pudimos presenciar un momento muy especial. En medio de la emisión, la presentadora María Patiño se sometió a pedicura en directo. Aunque podría parecer un momento como cualquier otro, desveló una fascinante historia.
La conexión con el pasado
La presentadora compartió que la persona que le hacía la pedicura se llamaba Camila, el mismo nombre que tenía su chinchilla que murió hace tiempo. Esta coincidencia despertó recuerdos y emociones en María Patiño, quien decidió compartir su historia con los espectadores.
Un momento cautivador
Durante la pedicura, la presentadora estaba sentada con las piernas estiradas sobre una mesa. Le rodeaban otros colaboradores del programa como Kiko Matamoros, Chelo García-Cortés y Víctor Sandoval. Belén Esteban, por su parte, grababa todo el evento y de vez en cuando hacía comentarios divertidos.
La historia de la chinchilla
María Patiño tenía dos chinchillas muy conocidas. En una ocasión, las llevó al plató de Sálvame y las mostró en directo, pero esta vez fue diferente. La presentadora explicó que una de las chinchillas, Camila, había fallecido recientemente. Compartió cómo fue el momento en que la acompañó hasta su cueva y cómo la otra chinchilla, su hermano, permitió que pasara sus últimos momentos en paz.
Un momento emotivo
María Patiño desveló que fue uno de los momentos más difíciles que había vivido recientemente. Confesó que incluso se planteó no ir a trabajar debido a la afectación emocional. Víctor Sandoval, uno de los colaboradores del programa, también se emocionó al escuchar la historia de la chinchilla y compartió su propia experiencia con la pérdida de una mascota.
Un momento para recordar
Aunque algunos colaboradores intentaban aliviar la atmósfera con comentarios divertidos, la emoción de María Patiño y la empatía de Víctor Sandoval fueron evidentes. Ese momento cautivó a los espectadores y dejó una huella en la memoria de todos los que presenciaron esta historia tan especial.