Un Concierto Innovador en el Petit Palau
El pasado 9 de enero, el Petit Palau acogió un evento musical excepcional dentro del ciclo Km0 de la temporada BCN Clàssics. Las intérpretes Anna Urpina e Inés Moreno llevaron al público a un viaje sonoro que fusionaba el barroco con la contemporaneidad, presentando obras de compositores catalanes actuales como Josep Maria Guix y Joan Magrané.
Reinterpretación de Clásicos y Estrenos
Con un enfoque innovador, Urpina alternó entre varios instrumentos, utilizando un violín barroco afinado a 415 Hz para las piezas antiguas, que contrastaba con las sonoridades modernas. La interpretación de la ‘Sonata del rosario núm. 1’ de Biber destacó por su intimidad y profundidad, con un violín que transmitía una sensibilidad única.
Explorando el Galant
A continuación, la interpretación de una sonata de Juan Bautista Pla permitió a Urpina mostrar una faceta más variada, aunque algunos momentos revelaron pequeñas desafinaciones que matizaron la ejecución.
Creaciones Actuales: Frágil y Fresa
La noche continuó con ‘Fràgil’, de Josep Maria Guix, que requirió un cambio de instrumento. Urpina optó por el violín moderno aportando una nueva dimensión sonora a una obra que se presenta como una explosión de color y emoción. Para ‘Fressa’, de Joan Magrané, regresó al violín barroco, creando una armonía perfecta con el clave.
Inspiración Cinematográfica
Magrané compartió que ‘Fressa’ está inspirada en la película ‘El caballo de Turín’ de Béla Tarr, una conexión que sorprendió a la audiencia, demostrando que las raíces clásicas pueden inspirar las creaciones contemporáneas.
Redescobrint Jacquet de la Guerre
Uno de los momentos más destacados fue la presentación de la ‘Sonata I’ de Élisabeth Jacquet de la Guerre, una compositora que ha sido redescubierta recientemente. Urpina recuperó esta obra de la Biblioteca de París, ofreciendo al público una pieza dinámica y expresiva que cautivó a la audiencia.
Momento musical destacado: La Follia
El concierto se cerró con ‘La Follia’ de Arcangelo Corelli, una de las obras más icónicas del repertorio. En esta prenda, Urpina y Moreno brillaron con una compenetración excepcional, transformando el momento en una celebración de la música barroca con un toque contemporáneo. Moreno pasó del acompañamiento a una destacada coprotagonista, aportando energía y vivacidad a una interpretación ya memorable.
Con esta actuación, Urpina y Moreno demostraron que la música clásica no sólo perdura en el tiempo, sino que también evoluciona, ofreciendo nuevas experiencias en las audiencias modernas.