Los alojamientos de la zona registran una ocupación del 100% desde el jueves hasta el lunes
La Catalunya Central es uno de los destinos preferidos por los amantes del turismo rural, especialmente en estos días de Semana Santa. Tras la crisis sanitaria provocada por la Covid-19, los alojamientos rurales de la comarca han recuperado el ritmo y han colgado el cartel de completo desde el jueves hasta el lunes. Los visitantes provienen mayoritariamente del área metropolitana y buscan gozar de la naturaleza, la tranquilidad y la gastronomía de la zona.
El Berguedà, el Solsonès, el norte del Anoia, el Bages y Osona, las comarcas más demandadas
Las comarcas de la Cataluña Central que concentran más oferta de turismo rural son el Berguedà, el Solsonès, el norte del Anoia, el Bages y Osona. Estas comarcas ofrecen una gran variedad de paisajes, actividades y patrimonio cultural que atraen a los visitantes. Algunas de las casas rurales más conocidas son la Masía Can Feliu, en el Berguedà, la Casa Rural Cal Pauet, en el Solsonès, o la Casa Rural Cal Riera, en el norte del Anoia.
Montserrat, el polo de atracción por excelencia
Otro de los sitios más visitados durante estos días de Semana Santa es Montserrat, el símbolo de Cataluña. El monasterio y sus alrededores reciben cada año a miles de turistas, tanto catalanes como del resto del estado español y del extranjero. Los alojamientos del recinto, como la Hospedería, el Hotel Abat Cisneros y las Celles Abat Marcet, han agotado sus plazas. Según fuentes del monasterio, el número de visitantes depende mucho del tiempo que haga, pero aguardan una buena afluencia.
Los turistas extranjeros, los grandes ausentes
Pese a la buena marcha del turismo rural en la Catalunya Central, todavía queda pendiente la recuperación de los turistas extranjeros, que antes de la pandemia representaban una parte importante de la demanda. La situación sanitaria y las restricciones de movilidad han provocado que este año no hayan podido venir. Además, Semana Santa no es una de las épocas de mayor afluencia de este tipo de visitantes, que prefieren el verano o el puente de la Purísima. Los gremios de turismo rural confían en que la vacunación y la mejora de la situación permitan recuperar este segmento de mercado lo antes posible.