La relación de la reina Letizia y la Iglesia

Una relación tensa

La relación entre la reina Letizia y la Iglesia no es precisamente armoniosa. La consorte no muestra ningún interés por los actos religiosos e incluso ha tenido que participar en ceremonias católicas por obligación, sin mostrar entusiasmo. Por otra parte, el rey Felipe VI, aun siendo algo más respetuoso, tampoco demuestra una gran pasión hacia las creencias cristianas. Esta actitud ha llevado a un progresivo distanciamiento de la corona respecto a la Iglesia, como parte de una estrategia de modernización de la monarquía.

Violación de los mandamientos

Más allá del distanciamiento, la pareja real ha violado uno de los 10 mandamientos del catolicismo: el de no mentir. Antes de su boda, ocultaron un aborto de la reina Letizia, violando así los principios de la religión. Esta información fue revelada por David Rocasolano en su libro ‘Adéu, princesa’. Este episodio implicó la ocultación de pruebas para garantizar la realización del matrimonio, acción que no fue bien recibida por parte de la Iglesia y la reina Sofía.

Mentiras hacia la Iglesia

Según el relato de Rocasolano, Letizia se sometió a un aborto en la Clínica Dator de Madrid, del que Felipe pidió la eliminación de todos los documentos para asegurar que la boda se llevaría a cabo. Esta acción, contraria a los principios de la Iglesia, fue considerada hipócrita por diversas fuentes. Además, la pareja pactó que la consorte se haría pasar por convertida antes de la boda, una decisión que fue mantenida incluso frente al Papa Francisco.

Conclusión

La relación entre la reina Letizia y la Iglesia ha estado marcada por la distancia y las acciones que han violado los principios de la religión. Esta tensión ha generado una imagen de hipocresía y ha contribuido al distanciamiento de la corona de esa institución.

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