Una Ascensión Silenciosa
Letícia accedió a la corona de forma discreta, pero con el apoyo y el cariño de la ciudadanía. Ya era un rostro conocido en TVE, y esa era la intención de Felipe VI cuando impulsó su participación en los informativos de la cadena pública.
Una Relación Compleja
Sin embargo, su relación con la familia real no fue del todo armoniosa. Especialmente, no fue bien recibida por parte de los Borbones, sobre todo por Juan Carlos y la infanta Elena, debido a su condición de plebeya. Esto generó un trato de superioridad hacia ella.
Una Venganza Sutil
Durante su primera década como princesa, Letizia tejió un plan para responder a ese trato despectivo. Este plan se materializó en el 2014, cuando Felipe forzó la abdicación de su padre a causa de los escándalos que rodeaban a la Casa Real. Esto marcó el comienzo del reinado de Felipe VI y Letizia como reyes.
Una Década de Liderazgo
Durante estos diez años, Letizia ha liderado con éxito la corona, asumiendo un papel destacado mientras Felipe VI se mantenía en un discreto segundo plano. Esta dinámica ha sido interpretada como una humillación para el rey, aunque ella ha demostrado su capacidad de liderazgo.
Desafíos y Desprestigio
Recientemente, se ha iniciado una campaña de desprestigio contra Letizia, poniendo en duda su reputación y fortaleza. Esta situación ha representado un duro golpe para ella, obligándola a aceptar un papel secundario como reina consorte ya participar en actos institucionales de menor relevancia.
El Poder en Manos de Felipe VI
Ahora, el peso de la institución real recae principalmente en Felipe VI, mientras Letizia ha perdido el control de la situación y ha tenido que ceder terreno ante esta campaña de desprestigio.
Conclusiones
En resumen, la transformación silenciosa de Letizia y su relación con Felipe VI han estado marcadas por momentos de liderazgo, venganza y desafíos. Sin embargo, su reputación se ha visto afectada por una campaña de desprestigio, cambiando el rumbo de su papel en la corona.