Revisiones posteriores a la inauguración
Tras la reciente inauguración del tramo reformado de la ronda de Sant Antoni, el Ayuntamiento de Barcelona ha decidido implementar cambios significativos. Las adaptaciones, que incluyen mejoras en la señalización y aparcamiento, buscan optimizar el tráfico en la zona. El consistorio ha explicado que el proyecto se encuentra todavía en fase de construcción, con trabajos en curso en la calle Tamarit, y que la movilidad no se podrá estabilizar hasta que las obras estén completamente terminadas.
Iniciativas para una mejor circulación
Con el objetivo de minimizar el tráfico, se está trabajando en la instalación de señalización disuasoria en la calle Floridablanca, que pretende limitar el volumen de vehículos que circulan por la calle Villarroel. Además, se instalará nueva señalización en el cruce entre Villarroel y la ronda de Sant Antoni, así como restricciones de entrada a Ciutat Vella a través de la calle de la Riera Alta.
Nuevo régimen de aparcamiento para residentes
Un cambio destacado es la modificación del aparcamiento de carga y descarga, que pasará a ser exclusivamente para residentes de 8 a 20 horas. Anteriormente, el aparcamiento era accesible para todo el mundo fuera de este horario. Además, se incorporaron nuevos espacios para bicicletas, que no estaban disponibles durante la inauguración.
Estudio de ajustes semafóricos
El Ayuntamiento también está considerando posibles ajustes en los semáforos en este primer tramo reformado, por donde transitan varias líneas de autobús. Los ciclos de luz verde son breves, y el consistorio quiere asegurarse de que la movilidad se mantenga fluida.
Perspectivas sobre el aparcamiento de motos
Por lo que respecta al aparcamiento de motos, el Ayuntamiento está explorando opciones para implementar controles de acceso en el segundo tramo, entre Villarroel y Casanova-Floridablanca, con la intención de que sólo los vecinos puedan acceder a ellos. Aún no se han especificado los detalles de estos controles, como la posibilidad de instalar pilones, utilizados en otras áreas de la ciudad.
Análisis de la configuración de los servicios
El consistorio también manifestó su intención de examinar la disposición del cordón de servicios de este tramo, que incluye zonas de aparcamiento para motos. Si se considera necesario, podrían transformarse algunas plazas destinadas a motos, situadas cerca de la calle de Urgell, en espacios para bicicletas, en un esfuerzo por promover una movilidad más sostenible.