Un comienzo del año con cifras alarmantes
Cataluña enfrenta una situación crítica con la llegada de menores extranjeros no acompañados. En los primeros 31 días de enero de 2025, se registraron un total de 191 menores, una cifra que, a pesar de ser más baja que en enero de 2024 (371), representa la tercera más alta desde el comienzo de los registros.
Tendencias y patrones de llegadas
Las llegadas no muestran un patrón predecible durante todo el año. Las estadísticas indican que los números son generalmente más altos al comienzo del año, disminuyendo durante la primavera, y luego experimentaron un aumento en el verano y volviendo al final del año. Esta variabilidad hace que sea difícil anticipar cuántos menores podrían llegar en 2025.
Posibles escenarios para el futuro
Si se mantiene el ritmo actual, Cataluña podría ver la llegada de hasta 2,292 menores este año, lo que lo convertiría en el quinto más alto en términos de llegadas ya que tiene datos, pero el más bajo de los últimos cuatro años, destacando la cronización de esto fenómeno.
El perfil de los menores llegó
De los 191 niños que han llegado, el 55.5% son originarios del Magreb y el 40.8% de las naciones subsaharianas. Además, la mayoría de ellos son hombres, con Barcelona (33.7%) y Girona (20.4%) como las provincias más menores.
Los desafíos de la recepción
La recepción de menores no acompañados es un gran desafío para la administración catalana. El generalitat ha reconocido que el gasto mínimo anual para administrar esta situación supera los 100 millones de euros, una cifra que podría ser aún mayor si se tuvieran en cuenta todos los costos asociados.
La situación actual de menores
La falta de espacio adecuado para alojar a estos jóvenes ha llevado a situaciones preocupantes, como muchos de ellos teniendo que pasar la noche en las estaciones de policía de los Mossos d’Esquadra. Estas circunstancias reflejan el desbordamiento experimentado por la administración frente al aumento constante de las llegadas.
Reflexiones sobre el futuro
La situación de los menores extranjeros no acompañados en Cataluña sigue siendo un tema de debate y preocupación. Las autoridades necesitan encontrar soluciones sostenibles que no solo aborden la recepción, sino también la integración de estos jóvenes en la sociedad, para garantizar un mejor futuro para ellos.