Un Reconocimiento Internacional
La Semana de la piedra seca ha vuelto a ser un evento destacado en Andorra, impulsado por la colaboración del Departamento de Patrimonio Cultural y el Espacio cultural Cal Pal. Esta edición ha adquirido una nueva dimensión, puesto que la técnica de la piedra seca ha sido recientemente reconocida por la UNESCO como patrimonio inmaterial de la humanidad. Este reconocimiento no sólo celebra la habilidad de los artesanos andorranos, sino también resalta la importancia cultural de esta tradición.
Premios y Creatividad Fotográfica
La clausura de la Semana tuvo lugar en un acto emotivo en Cal Pal, donde la ministra de Cultura, Juventud y Deportes, Mònica Bonell, entregó los premios del 5º concurso ‘El arte de la piedra seca’. Un jurado experto, formado por figuras destacadas como el fotógrafo Àlex Tena y el asesor pedagógico Patrick Morlaes, seleccionó cinco fotografías ganadoras entre las 64 presentadas en Instagram. Los criterios incluían no sólo la calidad visual, sino también la capacidad de expresar los valores del patrimonio.
Los Ganadores
Los artistas reconocidos en esta edición han sido Maria Núria Moreno, Iris Grau, Jordi Castelar, Alan Manchado y Alexandra Capdevila, cada uno aportando una visión única sobre el arte de la piedra seca a través de sus imágenes.
Fomentando el Talento Joven
Además del concurso fotográfico, el evento incluyó un especial reconocimiento para los jóvenes participantes en un taller de dibujo dedicado a la piedra seca, dirigido por Patrick Morlaes. Este taller, realizado en las escuelas francesas del país, ofreció a los alumnos la oportunidad de conectar con esta técnica a través del dibujo al aire libre, fomentando su apreciación y comprensión.
Premios para la Juventud
Los dos mejores dibujos de cada clase fueron premiados con libros sobre piedra seca y entradas para museos, una iniciativa que busca estimular el interés y el conocimiento de los más jóvenes sobre esta herencia cultural.
Reflexiones sobre el Patrimonio
La Semana de la piedra seca ha sido un éxito rotundo, consolidando el compromiso del Departamento de Patrimonio Cultural y de Cal Pal con la preservación de este arte ancestral. A través de actividades como estas, se promueve la conciencia sobre la importancia de la piedra seca y la necesidad de conservar y transmitir esta tradición a las futuras generaciones. La valoración positiva de la participación en el evento demuestra el creciente interés por este patrimonio, esencial para la identidad cultural. de Andorra.