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Colony Simon: Un vecindario olvidado reclamando atención

by PREMIUM.CAT
Una escena marcada y conmovedora en 'Colònia Simón', un vecindario en 'Puigcerdà' que encarna 'abandono institucional' y 'desilusión comunitaria'. Las calles están llenas de 'pavimento agrietado' y 'bache', lo que refleja años de negligencia. Puddles de agua, congelados en 'parches de hielo peligrosos' debido a las 'bajas temperaturas de invierno', crean un paisaje traicionero para los residentes. En el fondo, la 'prisión de Puigcerdà abandonada' se cierne, un símbolo de la 'negligencia crónica' del área por las autoridades locales. La atmósfera está pesada con un sentido de "desesperación", ya que los residentes navegan por su vida diaria en medio del "deterioro" que amenaza su seguridad. Un "patio de recreo infantil pequeño", visiblemente en mal estado, se erige como un marcado recordatorio de la falta de mantenimiento básico. El contraste entre las "promesas de mejora" hechas por los líderes políticos y el estado actual del vecindario es palpable, evoca sentimientos de "frustración" y "desesperanza". La im

Una comunidad a la sombra de la indiferencia

Ubicado en el centro de Puigcerdà, el Distrito de Colonia Simón se presenta como un testimonio del desinterés institucional y las promesas no llenas. En un entorno que ha sufrido el paso del tiempo y el abandono, los vecinos están atrapados en una realidad que han estado esperando durante años.

Después de las promesas, decepción

Hace dos años, Francesc Armengol, líder del futuro, eligió a Colony Simón como un escenario para comenzar su campaña electoral. En ese momento, muchos residentes vieron un rayo de esperanza. Hoy, sin embargo, el vecindario permanece igual de descuidado, con calles dañadas y una calidad de vida que deja mucho que desear.

Las condiciones de vida que inconvenientes

Las imágenes del vecindario son un claro reflejo de su realidad: charcos que se transforman en placas de hielo peligrosas durante el invierno, caminos sin pavimentar y una atmósfera que denota una falta de atención por parte de las autoridades. Los vecinos lamentan que sus problemas no parezcan preocuparse a nadie hasta que lleguen las elecciones.

Un passat que pesa

Colony Simón no es solo un grupo de casas; Es un lugar con una historia marcada por la marginación. La presencia de la antigua prisión, ahora abandonada, simboliza la negligencia que la comunidad ha sufrido a lo largo de los años. «No somos parte de los itinerarios turísticos, y esto nos hace invisibles a los ojos de las autoridades», dice un residente de renuncia.

Una demanda de derechos básicos

Lo que afirman los vecinos de Colonia es simple: infraestructura segura, mantenimiento de espacios comunes y un mínimo de reconocimiento por parte de los gobiernos. No buscan ser el centro de atención, sino simplemente que son valorados como ciudadanos con derechos.

El llamado a la acción

Los habitantes han perdido la fe en las promesas vacías. «Ya no queremos discursos, queremos acciones», dice un vecino, enfatizando la necesidad de una respuesta real a una situación que se ha vuelto insostenible. La esperanza es que esta vez las autoridades tomen nota y actúen antes de que sea demasiado tarde.

Mirando hacia el futuro

Con la mirada en un mejor mañana, los vecinos de Colonia Simón esperan que su realidad cambie. No quiero ser olvidado o ignorado; Solo quieren que se escuchen sus voces y que se satisfagan sus necesidades. El vecindario existe y, con él, las esperanzas de las personas que viven allí.

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