Operación contra el robo de infraestructura crítica
El 2 de abril, los Mossos d’Esquadra lograron desactivar una organización criminal dedicada al robo de baterías y cobre en instalaciones de telecomunicaciones en Cataluña. Esta operación culminó en el arresto de cuatro individuos entre las edades de 34 y 46 años, acusados de perpetrar robos en varios centros en Vallbona de Anoia, Códol de Castellar, Guardiola de Bergiedà y Sant Martí Vell.
El origen de la investigación
La investigación comenzó en noviembre de 2024, cuando una compañía de telecomunicaciones denunció la pérdida de baterías de un repetidor en Vallbona d’Anoia. Este robo provocó que la cobertura se interrumpiera en el área, dejando las áreas circundantes en el incomunicado durante cuatro horas, incluidos los servicios de emergencia esenciales.
Modo de operación Sofisticat
Los investigadores descubrieron que el grupo operaba con un plan bien estructurado. Eligieron sus objetivos meticulosamente, definiendo rutas alternativas y horarios específicos para evitar ser detectados. Utilizaron vehículos de alquiler y teléfonos móviles registrados en nombres de terceros para evitar la trazabilidad, y administraron la transferencia de material robado rápidamente a los vertederos.
Estructura jerárquica y liderazgo
El grupo trabajó con una jerarquía clara, con un líder que tenía un control firme sobre los otros miembros. Este líder manipuló a los que reclutaron, ofreciendo falsas promesas de alojamiento y trabajo a cambio de su lealtad y participación en actividades criminales. Esto permitió la planificación de los robos sin expuestos excesivamente.
Policía y arrestos
Después de meses de monitoreo, los agentes de UCM vincularon al grupo con más de veinte robos similares, acreditando su participación en cuatro casos específicos. Además de Vallbona d’Anoia, los robos ocurrieron en Códol de Castellar, Guardiola de Bergedà y Sant Martí Vell entre enero y febrero de 2025, con pérdidas superiores a 10,000 euros.
Operación final y descubrimientos
El 19 de marzo, los Mossos hicieron récords en Llagostera y Girona, donde tres miembros del grupo arrestaron y encontraron documentación relacionada con el robo, así como una instalación de cultivo de marihuana con casi 5 kg de brotes. El líder del grupo, que no estaba en casa durante los registros, fue detenido más tarde, completando así la desarticulación de la organización.
Consecuencias e implicaciones
Los detenidos, que acumulan más de 60 antecedentes, han sido realizados en la corte, y la investigación ha revelado no solo la actividad delictiva relacionada con las telecomunicaciones, sino también posibles conexiones con el cultivo de marihuana. Esta operación enfatiza la importancia de la vigilancia y la rápida respuesta al robo de infraestructura crítica para la seguridad pública.
