Deseo de reintegración en la familia real
Joan Carles de Borbón anhela ser incluido nuevamente entre sus seres queridos, aunque sea de forma restringida en encuentros privados. Sus allegados afirman que el emérito está decidido a regresar a España, un anhelo que su hijo, Felipe VI, parece estar decidido a evitar a toda costa. A la Casa Real le resulta favorable que Joan Carles continúe residenciado en Abu Dabi, lejos de la atención mediática y los posibles escándalos que podría generar. Sin embargo, esto no ha silenciado sus insistentes solicitudes, lo que ha comenzado a resultar algo molesto.
Relación padre-hijo en mejora
Recientemente, parece que la tensión entre Joan Carles y Felipe VI ha disminuido. El emérito ha estado pasando más tiempo en Galicia, y se especula que se le permite realizar estas visitas. Utiliza como excusa su participación en regatas, un evento marítimo que le solicita como un favor personal, ya que esta actividad representa una de sus pasiones más profundas a las que no desea renunciar.
Aprovechando el momento
Con la relación familiar mostrando signos de mejora, el emérito busca capitalizar esta situación. Su aspiración es poder ocupar algún rol, por pequeño que sea, en actos oficiales. Según informes recientes de Monarquía Confidencial, Joan Carles ha manifestado su deseo de asistir a la proclamación de la Constitución de Leonor, a la ceremonia de juramento de bandera de su hijo y a los eventos conmemorativos por la década en el trono de Felipe. Sin embargo, todas estas solicitudes han sido desestimadas.
Justificación de las negativas
Las explicaciones que recibió para cada uno de estos rechazos fueron consistentes. Desde la Zarzuela le comunicaron que, aunque no se oponían a su presencia, se trataba de eventos en los que no correspondía que los reyes eméritos asistieran. Esta justificación, al parecer, no resultó convincente para él, quien tuvo que aceptar la negativa.
La persistencia de su deseo
A pesar de las negativas, Joan Carles de Borbón no pierde la fe y continúa haciendo solicitudes. Recientemente, ha pedido a su hijo poder ir al puerto de Cádiz para despedir a su nieta, quien partirá en el buque escuela Juan Sebastián Elcano en enero, con una travesía de seis meses por diferentes destinos. Esta experiencia marítima es muy significativa para el emérito, quien siempre ha tenido una fuerte conexión con el mar.
El futuro incierto
El emérito mantiene viva la esperanza de que, en algún momento, se materialice un encuentro público con la princesa. Del mismo modo, sigue deseando regresar a España. Según fuentes cercanas, «no hay un plan inmediato de retorno, pero Joan Carles pretende hablar con su hijo sobre la posibilidad de hacerlo en un futuro cercano».