Un nuevo capítulo para Pere Pau
El distrito de Pere Pau, ubicado a solo seis kilómetros del núcleo central de Vilafranca, está en camino a transformar su situación administrativa. Actualmente, los vecinos en esta área, que está al lado de Sant Pere Molanta, han comenzado un proceso para solicitar su transferencia al municipio de Olèrdola.
La realidad del barrio
Con un área de poco más de 3.6 hectáreas, Pere Pau se caracteriza por su estructura de tres calles que solo se pueden acceder a través de Sant Pere Molanta. Esta peculiaridad geográfica ha generado un sentido de identidad entre los residentes, que a menudo se sienten más vinculados a Olèrdola que con Vilafranca, aunque están oficialmente registrados en el último municipio.
Un vínculo con Sant Pere Molanta
Josep Ventura, portavoz de los vecinos, expresa claramente su preocupación: ‘Nuestra vida diaria se desarrolla en Sant Pere. Compramos aquí, participamos en actividades locales y tenemos a nuestros seres queridos en el cementerio de esta ciudad ‘. Esta declaración destaca el fuerte vínculo que sienten los vecinos con la comunidad de Sant Pere Molanta.
El impacto de la situación actual
El sistema actual, en el que los residentes de Pere Pau pagan impuestos en Vilafranca, genera un sentido de desigualdad. «Queremos que nuestra realidad se refleje en nuestra contribución fiscal», agrega Ventura, enfatizando que su solicitud no es un ataque en Vilafranca, sino un reclamo de derechos y reconocimiento.
Acciones del Ayuntamiento de Olèrdola
Fina Mascaró, el alcalde de Olèrdola, reconoció que los vecinos fueron «abandonados» por su actual Ayuntamiento. Para regularizar esta situación, el Ayuntamiento ha comenzado la redacción de tres informes clave: planificación legal, económica y urbana, que detallan la necesidad de este cambio municipal.
Forma de seguir
El plenum municipal de Olèrdola está programado para el 3 de junio, donde se votará la propuesta de incorporar Pere Pau. Si se aprueba, el proceso burocrático continuará con una exposición pública de 30 días y una revisión del Ayuntamiento de Vilafranca, antes de pasar por varias instancias administrativas.
Reacción de Vilafranca
Desde el Ayuntamiento de Vilafranca, el alcalde Francisco Romero recordó que la situación de Pere Pau es el resultado de una delimitación histórica. Romero ha expresado su disposición para revisar la delimitación si se presentó una propuesta formal, pero ha advertido que todos los aspectos relacionados con el uso del territorio deberán analizarse.
El futuro del vecindario
La situación en el distrito de Pere Pau es un ejemplo del complejo administrativo que afecta a muchas comunidades. Su lucha por su propia identidad no es solo una cuestión de cambio en el municipio, sino también una búsqueda de reconocimiento y equidad en su vida diaria.