Crónica cedida por el Club Baloncesto Santfeliuenc
Sin duda, un equipo de leyenda. El Pajarraco CB Santfeliuenc protagonizó una gesta impresionante y derrotó al líder Odilo Cartagena por tercera vez esta temporada. Antes había hecho lo mismo con Maderas Sorlí Benicarló y Sant Antoni, que ahora recupera el primer puesto de la clasificación. Una proeza que demuestra el poder azul en los momentos decisivos. Gran trabajo colectivo. El CB Santfeliuenc controló el partido en todo momento y supo resistir las llegadas del Cartagena, que nunca logró ponerse por delante en el marcador. Avance importante del CBS cuando quedan cinco jornadas para el final de la liga, que se prevé emocionante.
Salida espectacular
El Pajarraco CB Santfeliuenc salió con todo en el parqué. Cowart fue una pesadilla para la defensa murciana, Castellón dominó su duelo con Cera y Brià, Gerard y Guim mordieron ante un rival demasiado lento y sin demasiados recursos (13-6, 5′). Tres puntos seguidos de Codinachs y una canasta de Brià cerraron un primer cuarto que despertaba esperanzas sinceras (25-14).
El segundo cuarto no cambió demasiado el guión, aunque los cartagenenses empezaron a respirar mejor. Los primeros cinco minutos fueron de intercambio de cestas con cierta ventaja azul. Zanca y Brià aprovecharon los espacios abiertos por el estadounidense Cowart para trazar una distancia educada (36-22). Pero el Cartagena, que no para nada llegaba líder a Sant Feliu, empezó a mostrar detalles de calidad y mayor intensidad para reducir la desventaja a siete puntos (41-34). El hermano pequeño Garuba encontró canastas ante un CBS algo nervioso. Sin embargo, los azules volvieron a reaccionar y un parcial de 6-0 con puntos de Gerard Martínez y Brià devolvían la felicidad a la grada. Una afición que se iba al descanso con la ilusión latiendo los labios, pero con la inquietud por una inoportuna tercera personal de Cowart que podía condicionar al resto de la historia (47-37).
La hora de la verdad
Inicio complicado. El Cartagena giraba el viento y ajustaba el electrónico (47-44, 22′). Beraza y Álex Jordá marcaban perfil. Coward, acondicionado por las faltas, trataba de aguantar. Sin embargo, el CBS encontró soluciones para llevar el juego con habilidad. Zanca, Cowart y sobre todo Brià en uno de esos de sus días en los que está tocado por Dios (58-48). Las últimas acciones nos dejaron un intercambio de cestas y la cuarta personal de Cowart. Había que respirar profundo (61-53).
El cuarto definitivo se abría con el horizonte claro gracias a dos canastas de Llorens (65-56). El Santfeliuenc sabía que debía moderar el juego para contener las embestidas desbocadas de Cartagena. Fueron minutos en los que Pol Olivier supo defender muy bien, Cowart equilibrar y Brià sumar (69-58, 35′). El Cartagena trató de presentar batalla hasta el final. Seis puntos seguidos comprimían el marcador (69-63). Minutos de tensión y contención en la afición. Nil Brià hizo el triple de la temporada con acrobacia aérea en un balón primero rechazado por el hierro y que después entraba en la red, no sabemos si empujada por Dios (77-70). La eternidad en un día. Los últimos 90 segundos se hicieron eternos, interminables, agónicos. Amalgama de personales, errores repartidos y nervios envueltos de esperanza en una victoria que ya no podía escapar. Desde el tiro libre se resolvió el desenlace. Los azules supieron conservar una renta suficiente en territorio minado y el Cartagena en la desesperada no pudo con la fortaleza del JCN. Jaque mate, Pajarraco aplastaba la jaula departamental.
Minuto 41
Una nueva jugada magistral. Este Pajarraco despega alto en los momentos críticos. De nuevo un líder, y ya van tres, sale escaldado de las garras del CBS. El triunfo del conjunto, del sentido colectivo del juego de un equipo que ha sabido reinventarse cuando el hada de la historia cambiaba su rostro en forma de bruja. Faltan cinco jornadas pero ya podemos empezar a decir que todo esto lo vivimos en el año de plata o plomo.
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