Un cambio radical en medio de una crisis
Hay esperanza al ver cómo cada vez más celebridades superan sus adicciones. Un ejemplo reciente es el de Cara Delevingne, quien dio un giro drástico a su vida. Le fue difícil identificar sus problemas de adicción, los cuales se agravaron con su entrada en la industria de la moda. Su primera experiencia en el modelaje ocurrió hace más de diez años, participando en un reportaje sobre sombreros. Sin embargo, su vínculo con las cámaras inició mucho antes, dejando una huella duradera en ella.
Luchando contra demonios personales
Desde niña, Cara Delevingne enfrentó el acoso escolar y la depresión, lo que la llevó a admitir que sus problemas con el alcohol comenzaron a los 8 años. Para muchos, es difícil olvidar el episodio de 2022 cuando unas fotos mostraron su estado de salud muy deteriorado. A raíz de su adicción a las drogas, fue captada desaliñada, descalza y con la mirada perdida, sin poder controlar sus movimientos ni dejar de fumar. No se parecía en nada a la glamorosa rubia que dominaba las pasarelas de moda más prestigiosas del mundo. En cambio, parecía una persona más afectada por la adicción.
El incidente sucedió en el aeropuerto de California, tras ser desalojada del jet privado de Jay-Z. Se veía errática y fuera de sí mientras hablaba por teléfono, con su guardaespaldas esperando para llevarla a su casa. La publicación de estas fotos alarmó a sus amigos y familiares, preocupados por su salud mental. En ese momento, Cara vivía en condiciones casi indigentes, pero esta experiencia la motivó a buscar la sobriedad. Ahora, puede mirar esos momentos difíciles desde una perspectiva diferente.
Reflexiones sobre una infancia tumultuosa
En una entrevista con la revista Sunday Times, la modelo habló abiertamente sobre sus adicciones, revelando que su relación con el alcohol comenzó mucho antes de lo que se pensaba. Recordó una boda familiar en 2001, cuando no tenía ni nueve años. ‘Ese día me emborraché,’ confesó. ‘Y solo tenía ocho años. ¡Qué edad tan absurda para emborracharme!’ Posteriormente, admitió que había recurrido a sustancias en sus momentos más bajos.
Cara reflexionó sobre las razones que la llevaron a las drogas y al alcohol, para concluir que pensaba que estas sustancias la ayudaban a superar cualquier situación difícil. Sin embargo, la realidad era opuesta, las drogas y el alcohol solo contribuían a su tristeza y depresión constante. ‘Siento que he recuperado mi poder y que ya no estoy bajo el control de factores externos,’ explicó. Todo esto cambió tras el devastador incidente en el aeropuerto.
Un ciclo familiar de adicciones
Repasando su niñez, los problemas de salud mental la acompañaron desde muy temprano. Criada en una acomodada y conservadora familia británica, asistió a un internado exclusivo para niñas de la alta sociedad. Cara ha mencionado repetidamente lo triste que fue su infancia. Su madre, Pandora Delevingne, era adicta a la heroína y padecía bipolaridad no diagnosticada, enfrentándose durante años a su adicción mientras criaba a sus hijas. Hoy en día, Cara agradece haber salido de ese círculo autodestructivo.
El incidente del 2022 fue un punto de inflexión que le brindó la oportunidad de rectificar sus errores y enfocarse en su sobriedad. Actualmente, Cara Delevingne se siente orgullosa de sí misma por haber dejado atrás ese oscuro capítulo de su vida.