Una victoria forjada en la segunda parte
El Tenerife, liberado de presiones y sin su entrenador en el banquillo, demostró su espíritu de lucha y la importancia de sus jugadores secundarios en su victoria por 2-0 sobre el Racing Club Ferrol.
El once inicial se lanzó al campo sin miedo, pero no fue hasta la entrada de los suplentes que el equipo local logró desequilibrar el partido.
Los delanteros de Garitano, un dúo en busca de la armonía
El entrenador José Luis Garitano mantuvo su apuesta por Enric Gallego y Ángel Rodríguez como delanteros, a pesar de las limitaciones de su plantilla.
Esta decisión obligó a desplazar a Roberto López a la banda derecha, lo que inicialmente desequilibró al equipo.
El Tenerife se sobrepone a las adversidades
A pesar de las dificultades, el Tenerife se sobrepuso a la falta de pegada del Ferrol y a la ausencia de su entrenador.
El equipo de Cristóbal Parralo, que había derrotado al Tenerife en el partido de ida, se mostró ineficaz en el área rival.
La frescura de los suplentes marca la diferencia
En la segunda parte, Garitano realizó cambios que dieron un nuevo impulso al Tenerife.
La entrada de Teto, Nacho y Bodiger aportó piernas frescas y desequilibró al Ferrol.
El ascenso del Tenerife B, un aliciente para la afición
Mientras el Tenerife luchaba en el campo, el equipo filial celebraba su ascenso a la Segunda Federación.
La afición, entusiasmada con el éxito de los jóvenes jugadores, se unió a la fiesta.
Los suplentes se convierten en héroes
Teto, con un elegante eslalon de Nacho, rompió el empate en el minuto 88.
En el tiempo de descuento, Bodiger selló la victoria con un soberbio cabezazo tras un centro preciso de Nacho.
Un triunfo que refuerza el espíritu del Tenerife
Esta victoria no solo suma tres puntos importantes, sino que también refuerza el espíritu de lucha y la confianza del Tenerife.
El equipo ha demostrado que puede superar las adversidades y que cuenta con jugadores capaces de marcar la diferencia.