Celebración de la Excelencia en Pastelería
El pasado sábado, Sant Vicenç dels Horts se convirtió en el escenario de una gala que homenajeó el arte de la pastelería en Catalunya. En esta ceremonia, cuatro destacadas pastelerías del Vallès Oriental fueron reconocidas con el prestigioso Premio Fava de Cacau, que distingue a las 50 mejores pastelerías de la región.
Tradición e Innovación: Los Ganadores
Las pastelerías galardonadas incluyen nombres bien conocidos, como la Pastelería Sant Llehí de Cardedeu y Sant Antoni, la Pastelería Mauricio Cot de Llinars, Pellizco Pastelería de la Garriga y la Pastelería Rodellas de Sant Celoni. Este año, la competencia ha sido intensa, pero estas tiendas han demostrado de nuevo su calidad y dedicación.
Reconocimiento a la Calidad y el Esfuerzo
Maurici Cot, propietario de la Pastelería que lleva su nombre, expresa su gratitud por el reconocimiento: “Somos especializados en productos sin gluten ni lactosa. Apreciamos que nuestro trabajo sea valorado en un sector a menudo olvidado”.
Un lazo familiar
La Pastelería Rodellas, con 47 años de historia, ha recibido el premio por quinto año consecutivo. Jordi Rodellas comenta: “Nuestro público es muy fiel y este premio nos ha ayudado a hacernos un nombre fuera de nuestra área. Hemos tenido el honor de preparar postres para los Premios Gaudí, algo que no habríamos imaginado”.
La Nueva Generación de Pasteleros
Pessic Pastisseria, con sólo tres años de existencia, se ha ganado el corazón de los clientes y ha obtenido el premio en dos ocasiones. Estela Durarri comparte: «El reconocimiento nos ha ayudado a crecer, tanto en ventas como en popularidad, y esperamos que este impulso continúe».
Un Distintivo de Calidad
La Fava de Cacau es un distintivo que no sólo aporta prestigio, sino que también sirve como herramienta de marketing para las pastelerías seleccionadas. Este año, la lista incluye nuevas incorporaciones, como la Pastelería Atzavara de Tona, reconocida por primera vez.
Futuro Prometedor para el Sector
Con la Fava de Cacau, las pastelerías no solo celebran sus logros, sino que también miran hacia el futuro con optimismo. El aumento de la visibilidad en las redes sociales y el interés del público por sus creaciones sugieren que el mundo de la pastelería catalana seguirá evolucionando y sorprendente.