Requisición de documentación por parte de la Fiscalía Europea
A solicitud de la Fiscalía Europea, agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil realizaron una visita a las dependencias de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias durante la pandemia para recolectar nueva documentación relacionada con los contratos sanitarios ejecutados por el Servicio Canario de Salud.
Según reportes de los medios de comunicación en Canarias, esta acción fue confirmada por el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, durante una visita a las instalaciones del Hospital de La Candelaria.
Casos de irregularidades en las compras de material sanitario
La Fiscalía Europea ha asumido la investigación de presuntas irregularidades en la compra de material sanitario durante la pandemia, especialmente en el llamado caso Mascarillas, donde se sospecha que se abonaron cantidades significativas por adelantado a empresas no sanitarias sin recibir los productos correspondientes.
En Canarias se presentaron tres casos relacionados con la compra de material sanitario durante la pandemia. En uno de ellos, se pagaron cuatro millones de euros a una empresa por mascarillas que nunca fueron entregadas. En otro caso, se descubrió un presunto fraude en la compra de material sanitario, y en un tercer caso se investigan a empresarios por delitos relacionados con la Hacienda Pública.
Implicados y acciones cuestionables
En el marco del escándalo, se menciona la implicación del presidente de la UD Las Palmas y de un exdiputado, entre otros. Además, se detalla que funcionarios y empresarios estarían involucrados en acciones cuestionables, como la compra de vehículos de lujo con fondos que presuntamente se desviaron de contratos de suministro de material sanitario.
Compra de mascarillas bajo sospecha
Uno de los casos mencionados involucra una operación cuestionable de compra de mascarillas por parte del Servicio Canario de Salud a una empresa sin la debida solvencia técnica y profesional. Esta empresa, al parecer, no entregó las mascarillas acordadas y utilizó parte del dinero para adquirir coches de lujo, lo que ha generado un escándalo ligado a presuntas irregularidades en la gestión de recursos durante la pandemia.
El segundo pago realizado por las mascarillas que nunca fueron recibidas ha sido calificado como temerario y negligente por parte de la Fiscalía Anticorrupción, ya que se sostiene que ocasionó un perjuicio económico significativo. Se señala que el adjudicatario del contrato solo pudo ofrecer mascarillas falsas después de haber cobrado millones de euros por adelantado.
Además, se destaca que a pesar de las irregularidades, la administración autonómica no resolvió el contrato con la empresa, ni exigió una compensación por los daños sufridos, lo que suscitó críticas sobre la gestión de los recursos públicos.