El conflicto de vivienda en la Plaza del Baluard
En Reus, la tensión se palpa en la Plaza del Baluard, donde dos familias están al borde de la expulsión de su hogar. Un conocido propietario de bienes raíces ha anunciado desalojos programados para los próximos meses, afectando a un total de seis personas, incluidas menores y una persona mayor con discapacidad.
Un nuevo propietario con intenciones controvertidas
Según la Unión de Vivienda Reus, la propiedad en cuestión pertenecía al Banco Sabadell, que decidió venderla a una ‘multiplicada’ con una cartera de bienes raíces que incluye restaurantes y otros edificios en la región. Esta transacción ha generado una ola de preocupación entre los vecinos, que ven sus vidas amenazadas por las ambiciones de un nuevo propietario.
Reclamos e intentos de negociar
Los activistas han expresado su descontento, pidiendo una solución a través de un acuerdo de alquiler social. A pesar de sus esfuerzos por lanzar un diálogo con el propietario, han sido recibidos con intimidación. Miquel, uno de los miembros de la Unión, enfatiza que las familias han estado habitando el edificio durante dos años, después de ocupar los pisos en un momento en que eran del banco.
La responsabilidad de Banco Sabadell y las autoridades
De la Unión, se indica que Banco Sabadell vendió la propiedad al conocer la situación de la vulnerabilidad de los ocupantes. Esta decisión ha sido criticada como ‘muy fría’, y se argumenta que la entidad ha delegado su responsabilidad con un tercero, que ahora busca desalojar a las familias. Los activistas han denunciado la actitud agresiva del nuevo propietario, que fue repetidamente al edificio con una postura amenazante.
Movilizaciones y demandas de mediación
Para lidiar con esta situación, la Unión de Vivienda ha organizado una llamada para reunirse frente al edificio el viernes por la mañana, coincidiendo con la primera orden judicial de desalojo. Los activistas insisten en que la negociación con el propietario es esencial para garantizar los derechos de las familias afectadas.
Críticos a la pasividad institucional
Además, el sindicato ha expresado su decepción con la inacción de la oficina de vivienda del Ayuntamiento de Reus. Laia, miembro de la Unión, ha declarado que las instituciones no han podido brindar apoyo y mediación en este conflicto, dejando a las familias a su suerte en un momento de gran vulnerabilidad.
Un futuro incierto para las familias
A medida que se acercan las fechas de los desalojos, la comunidad se moviliza para defender los derechos de estas familias. La situación actual destaca la necesidad urgente de una solución de vivienda sostenible y un compromiso de las autoridades de abordar las crecientes desigualdades en el acceso a la vivienda.