Una Jornada de Celebración Espiritual
El 15 de agosto marca un día especial para la Unidad pastoral Virgen del Pinar, que, como es costumbre, ha conmemorado la Asunción de la Virgen María. Esta festividad ha estado marcada por dos ceremonias significativas, con la presencia del arzobispo Joan Planellas, y ha contado con la asistencia entusiasta de los fieles y autoridades locales.
La Canonja: Un Inicio Festivo
La jornada comenzó en la parroquia de San Sebastián de la Canonja, un municipio que celebraba su fiesta mayor estival. El arzobispo Planellas fue acogido por el alcalde Roc Muñoz y otros miembros del consistorio en un acto institucional que precedió a la celebración de la eucaristía. En la iglesia de San Sebastián, la misa fue un momento de reflexión y comunidad.
Procesión Festiva en la Canonja
Tras la misa, tuvo lugar una procesión en la que la imagen de la Virgen María fue llevada por los participantes, rodeada por los elementos festivos tradicionales. Este recorrido por las calles de la Canonja fue una manifestación de devoción y un momento de conexión con la comunidad.
Celebración en Salou: Tradición y Comunidad
La festividad continuó en Salou con la misa solemne en la parroquia de Santa Maria del Mar. En esta ocasión, el arzobispo estuvo acompañado por otros presbíteros de la Unidad pastoral. El acto atrajo a numerosos miembros del ayuntamiento, incluyendo al alcalde Pere Granados, así como representantes de pescadores y diversas entidades locales.
Procesión Marítima y Terrestre
Tras la misa, la comunidad tomó las calles en una procesión que combinó elementos terrestres y marítimos. Los pescadores de Salou llevaron la imagen de la Virgen, siguiendo un recorrido que incluyó un paseo por el mar. La jornada se cerró con un espectacular castillo de fuegos artificiales, iluminando el cielo nocturno en honor a la Virgen.
Una Tradición Viviente
Con la culminación de la procesión en la iglesia, donde se cantaron los gozos en Santa Maria del Mar, estas celebraciones no sólo reflejan la devoción religiosa, sino también la rica tradición cultural que une a la comunidad de Tarragona. La combinación de fe, música y festividad reafirma la importancia de estos momentos en la vida local.