La Fiscalía de Barcelona pide investigar las torturas cometidas por policías franquistas
La Fiscalía de Barcelona, en colaboración con la Fiscalía de Memoria Democrática, ha solicitado al juez que admita a trámite la querella presentada por los hermanos Ferrándiz. Esta querella busca investigar las torturas que sufrieron a manos de agentes franquistas en la comisaría de Via Laietana en 1971.
Segunda querella por torturas franquistas en los juzgados de Barcelona
Esta es la segunda querella por torturas franquistas que se presenta en los juzgados de Barcelona. La primera, presentada por el activista Carles Vallejo, no fue admitida a trámite por la jueza, aunque se ha presentado un recurso ante la Audiencia de Barcelona. En España, actualmente solo hay una causa abierta por torturas franquistas, y la jueza está considerando archivarla debido a la prescripción.
Acusaciones contra miembros del Cuerpo General de Policía
La querella presentada por los hermanos Ferrándiz se dirige contra al menos cuatro personas, miembros del Cuerpo General de Policía adscritos a la Sexta Brigada Regional de Investigación Social de la Prefectura Superior de Barcelona. Todos ellos están acusados de cometer delitos de lesa humanidad mediante torturas.
Las torturas sufridas por los hermanos Ferrándiz
Los hermanos Ferrándiz fueron sometidos a torturas en la comisaría de Via Laietana después de ser detenidos en 1971 debido a su militancia antifranquista, cuando tenían tan solo 17 años. Fueron acusados de formar parte de la organización Jove Guàrdia Roja.
La lucha por la memoria histórica
Estas querellas presentadas por Vallejo y los hermanos Ferrándiz tienen un gran simbolismo, ya que las torturas por su actividad política y sindical contra la dictadura ocurrieron en la comisaría de Via Laietana, conocida como ‘casa de los horrores’ por los grupos antifranquistas. Diversas entidades de memoria histórica y partidos progresistas desean que este espacio, actualmente ocupado por la Jefatura de la Policía Nacional en Cataluña, se convierta en un memorial de la dictadura. Sin embargo, hasta ahora, tanto el Gobierno liderado por el PSOE como el liderado por el PP se han negado a convertir la comisaría en un lugar de memoria histórica, optando por mantener su uso policial.