Una demanda para preservar el patrimonio
La Asociación de Amigos del Templo Parroquial del Espíritu Santo de Barcelona ha presentado una demanda para evitar la demolición del edificio, donde se ha proyectado la construcción de la nueva Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Blanquerna – Ramon Llull. El proyecto ha recibido el rechazo de los vecinos y feligreses, quienes han recogido firmas a través de Change.org, reuniendo un total de 9.488 firmas hasta el momento. La demanda incluye medidas cautelares para dejar en manos de la justicia la decisión sobre el derribo de la infraestructura, previsto para inicios del próximo mes de mayo, según ha anunciado la entidad en un comunicado.
El proyecto de la nueva facultad y la resistencia comunitaria
El Arzobispado de Barcelona y la Fundación Blaquerna presentaron el proyecto para la futura facultad en 2022. Los planes incluyen la construcción de una capilla más pequeña que la actual, con una superficie máxima de 713 metros cuadrados, mientras que la facultad ocupará más de 4.000 metros cuadrados. La resistencia por preservar la iglesia está liderada por feligreses y ciudadanos preocupados por la pérdida del patrimonio, señalando que más allá del edificio, la parroquia es una comunidad vibrante con adoración eucarística perpetua, una vida sacramental activa y un grupo dedicado a santo José que atiende a pobres y necesidades.
La importancia de las vidrieras de la iglesia
La estructura de la iglesia alberga unas vidrieras de grandes dimensiones que se perderían si se derruyera la parroquia. Estas vidrieras son consideradas únicas en España por los vitralistas más prestigiosos, tanto por la técnica utilizada en su construcción como por su valor artístico. La Asociación está en trámites administrativos para catalogarlos como Bien de Interés Cultural Local, siendo su destrucción el objeto de lo contencioso. Las medidas cautelares presentadas constituyen un remedio urgente para evitar su inminente desaparición.
La situación actual y el apoyo comunitario
Según información de la Asociación, ya se está retirando el mobiliario de la parroquia y otros elementos litúrgicos de vital importancia para el culto, por orden del Arzobispado. El edificio se encuentra en Travessera de Gràcia, 401, en el barrio del Baix Guinardó, y es reconocido por su fachada contemporánea adornada con las vidrieras mencionadas, que son apreciadas desde dentro del templo.