Una comedia que evoca a clásicos
Imaginando un título digno de un relato de Massagran, el nuevo espectáculo ‘Un suegro de alquiler’ presenta uno de los episodios más divertidos de la carrera de Joan Pera. Esta obra, creada por Susanna Garachana y Jaume Viñas, se está exhibiendo en el Teatro Goya hasta finales de enero. Pera, uno de los actores más emblemáticos de Catalunya, ha entretenido a varias generaciones con su inconfundible capacidad cómica.
Argumento: Un plan que es complicado
La trama gira en torno a un joven enamorado que decide contratar a un actor para hacer de padre ante su futura suegra, con el objetivo de causar una buena impresión. Sin embargo, los eventos se tuercen cuando el actor original no puede acudir al encuentro, y en su lugar, un actor de doblaje, interpretado por Pera, toma el relevo. Esta situación desencadena una serie de malentendidos que mantienen al público al acecho.
Un elenco dinámico
Edu Lloveras, que interpreta al joven protagonista, aporta una energía refrescante en el escenario, necesaria para equilibrar el humor de Pera. Su capacidad para gestionar las improvisaciones del veterano actor es admirable, creando un contraste entre su físico imponente y una personalidad insegura.
El papel de las mujeres en el escenario
El personaje de Claudia Benito, a pesar de ser el más discreto, es esencial para esclarecer la trama y guiar a los espectadores a través de las marañas narrativas. Su actuación, llena de simpatía, complementa la energía cómica de sus compañeros masculinos.
Una señora con carácter
Munsta Alcañiz, en su papel de suegra, aporta una presencia imponente y una evolución que sorprende al público, pasando de una imagen de frialdad a una implicación total en el juego de la comedia. Su aparición con un traje espectacular es uno de los momentos más memorables de la obra.
Un guión que engancha
Pese a la simplicidad de su premisa, ‘Un suegro de alquiler’ destaca por su habilidad en dosificar las revelaciones, manteniendo la atención del público en todo momento. Garachana y Viñas han creado un texto que, aunque previsible en algunos momentos, logra sorprender con inesperados giros.
Un escenario que acompaña
La escenografía, diseñada por Enric Planas, es funcional pero podría haber sido más imaginativa. El piso donde se desarrollan los eventos, con un falso Mondrian, sirve de telón de fondo, pero algunas decoraciones podrían haber aportado mayor riqueza visual al espectáculo.
Un regreso a la comedia pura
Con ‘Un suegro de alquiler’, Joan Pera demuestra que todavía tiene mucho que ofrecer al mundo del teatro catalán. La obra es un recordatorio de lo que significa la comedia: un buen enredo, personajes carismáticos y un humor que provoca risas en cada momento. Esta producción es un verdadero regalo para los amantes del teatro y una oportunidad de disfrutar de la mejor versión de uno de los cómics más queridos del país.
