Un viaje inesperado al hospital
El Papa Francisco fue ingresado el 14 de febrero a los Gemelli policliniano en Roma, donde recibió tratamiento para una bronquitis que evolucionó a una neumonía bilateral. Su estadía en el hospital ha estado marcada por un monitoreo médico constante y un apoyo espiritual incondicional.
El camino hacia la recuperación
Después de 28 días de tratamiento, las fuentes del Vaticano han confirmado que el Papa ha descansado bien durante la noche. Los médicos han retirado el pronóstico reservado que se había mantenido durante los primeros días de admisión, gracias a una mejora significativa en su salud.
Evidencia médica que da esperanza
Los rayos X hechos recientemente de tórax han mostrado mejoras significativas, como se ha notificado en los boletines médicos. Sin embargo, los médicos mantienen al paciente en observación, ya que su recuperación sigue siendo un proceso delicado.
Condiciones de salud y apoyo espiritual
Aunque el pronóstico del Papa ha mejorado, su condición sigue siendo compleja. Actualmente, requiere asistencia respiratoria, alternando entre una máscara y ventilación mecánica durante la noche. A pesar de esto, el pontífice permanece activo y sigue los ejercicios espirituales de la curia romana mediante videoconferencia.
Oraciones y apoyo comunitario
El hospital ha organizado una hora de adoración eucarística diaria y masas en la capilla para rezar por la salud del Papa. Además, un rosario especial ha comenzado en honor a su recuperación, con la participación de los fieles de todo el mundo.
Solidaridad global en tiempos difíciles
El cardenal George Jacob Koovakad enfatizó la ola de mensajes de apoyo que han llegado de diferentes rincones del planeta, reflejando la profunda conexión espiritual que los fieles sienten al Papa. Las oraciones por su salud han sido numerosas y Syncheres.
Un cumpleaños celebrado con cariñoso
El jueves 13 de marzo, el duodécimo aniversario del Pontificado de Francesc. El personal del hospital sorprendió al Papa con un pastel y velas, un gesto que simboliza la unión y el apoyo que recibe en estos momentos difíciles.