Un Encuentro Culinario en la Montaña
El pasado lunes, lejos del bullicio gastronómico de la gran ciudad, tuvo lugar una reunión entre amigos en el encantador pueblo de Josa de Cadí. En este encuentro, los chefs Diego Alías, del restaurante Ca l’Amador, ubicado en este pintoresco pueblo en el parque natural del Cadí-Moixeró, y Mariano Golzalvo, chef del restaurante Lo Paller del Coc en el valle de Àssua, cocinaron juntos en una colaboración sin precedentes. Este evento convirtió a Josa de Cadí en el epicentro de la cocina de montaña.
Una Pasión Compartida por la Montaña
Aunque los dos chefs provienen de diferentes orígenes culinarios, comparten una pasión y amor por la montaña. Ambos coinciden en la importancia de una cocina arraigada en el territorio, que se actualiza sin perder su esencia. Su objetivo es crear sabores que evocan la pureza de la montaña, recordando el pasado pero también anunciando un futuro maravilloso. Estos chefs nos demuestran que hay vida más allá de los platos tradicionales de la región.
Una Experiencia Gastronómica Inolvidable
Al entrar en Ca l’Amador, fui recibido por Jordi de las Heras, sumiller y jefe de sala, quien amablemente me ofreció una cerveza artesanal de la Val d’Aran, especialmente elaborada para el restaurante. A pesar del descenso de las temperaturas en la montaña, disfrutamos del aperitivo en la terraza con vistas al monte Cadinell. Allí probamos deliciosos platos como coliflor envinagrada, patatas con lima y olivas.
En el comedor, nos deleitamos con una variedad de platos exquisitos. Comenzamos con un paté de cabrito con crujiente de maíz y pepinillo, seguido de buñuelos de oveja vacía con hierbas y xandri. Cada plato fue maridado con vinos cuidadosamente seleccionados, como el Taleia blanco del Castell d’Encús y el Textures de pedra de Raventós i Blanc.
La velada continuó con un ajoblanco de espárragos y caballa, así como boletus cocinados y laminados en crudo. Los chefs sorprendieron a los comensales al presentar los platos sin revelar su contenido, desafiándonos a adivinar los sabores mientras los disfrutábamos. La cena estuvo llena de risas y entusiasmo, y brindamos en honor a los talentosos chefs con un Montsant de la bodega Venus La universal.
El clímax de la noche llegó con la codorniz deshuesada rellena de foie y mollejas, y la entraña de potro envuelta en ceniza y cocinada al soplete. Estas creaciones culinarias provocaron elogios y fueron maridadas con un Montsant, el Dido de la bodega Venus La universal.
Para cerrar con broche de oro, disfrutamos de unas mollejas de vaca bruna y una jugosa chuleta de cabrito de Josa, acompañadas de queso Serrat Gros. Estos platos fueron maravillosamente elaborados y maridados con un Costers del Segre, el Nummulit de la bodega El Vinyer. Finalmente, nos endulzamos con un pijama muy personal y un delicioso chocolate con nueces, acompañados de una taza de sake hecho en Tuixén por Seda Líquida.
Una Experiencia Culinaria Inolvidable
Diego y Mariano nos brindaron una experiencia culinaria única en su tipo. A través de su complicidad y talento, nos mostraron su visión de la cocina de montaña. Este encuentro épico en Josa de Cadí quedará grabado en nuestra memoria hasta que volvamos a disfrutar de sus creaciones culinarias. Sin duda, estos chefs han dejado una huella imborrable en el mundo de la gastronomía.
