Adiós a un accesorio de fútbol
En el mundo del fútbol de Nottingham Forest, pocas figuras son tan icónicas como Alan Moore, una presencia firme en la ciudad durante casi cinco décadas. Mientras el club se prepara para su último partido de la temporada contra Chelsea, Moore, a la venerable edad de 79 años, cerrará un capítulo significativo de su vida.
Un viaje a través del tiempo
El mandato de Moore en los torniquetes comenzó en 1979 durante la legendaria era de Brian Clough, un período marcado por triunfos, incluidas dos victorias consecutivas en la Copa de Europa. Reflexionando sobre sus años de servicio, Moore comentó: «Esos eran tiempos realmente notables; la atmósfera era eléctrica y el equipo estaba en el pináculo del éxito».
Más que solo un trabajo
Para Moore, trabajar los torniquetes trascendieron mero empleo. «Me veo como embajador de Nottingham Forest», afirmó. Cada día del partido, saludaba a los fanáticos con calidez, convirtiéndose en una figura apreciada para muchos que pasaban por su puerta. «Comenzar a los fanáticos en su viaje al juego es un privilegio», agregó.
Conexión de construcción
Con los años, ha forjado lazos con innumerables seguidores. Un ventilador particularmente devoto hace que sea un ritual estrechar la mano de Moore en cada partido, ilustrando las conexiones personales que definen la experiencia de fútbol.
Una despedida de despedida
Mientras se prepara para reubicarse con Matlock, Derbyshire, la decisión de retirarse fue agridulce para Moore. «Adoro este club y su espíritu comunitario», reflexionó. Para conmemorar su dedicación, Nottingham Forest lo sorprendió con una gira privada por el estadio, una camiseta firmada y boletos para el primer partido de la próxima temporada.
Celebrando un legado
Durante la emotiva gira, mientras Moore caminaba por el icónico túnel y subió al campo, expresó su incredulidad por el honor que le otorgó. «Nunca imaginé que estaría experimentando algo como esto. Es simplemente increíble», exclamó.
Mirando hacia el futuro
Un portavoz del club elogió el notable compromiso de Moore a lo largo de los años, afirmando: «Su pasión por Nottingham Forest es evidente, y anticipamos ansiosamente verlo en las gradas, animando al equipo que ama tanto». A medida que Moore se aleja de su papel, su legado sin duda continuará resonando dentro de la comunidad forestal.