La celebración de la poesía en los tiempos modernos
El Festival de Poesía de Barcelona ha transformado nuevamente la ciudad en un epicentro de versos y melodías, capturando la atención de una audiencia muy especial. En esta edición, los protagonistas indiscutibles eran los adultos jóvenes, una generación a menudo eclipsada por su entorno, que respondió con entusiasmo a pesar de las adversidades climáticas.
Un escenario inesperado
La noche, inicialmente planeado para tener lugar en el convento de Sant Agustí, necesitaba un cambio de escenario debido a la posibilidad de lluvia. Por lo tanto, el mercado de los antiguos organizó el evento, creando una atmósfera mágica con sus paredes cerradas y sus luces azules que dieron un toque gótico por la noche.
La respuesta de los jóvenes
Los asistentes, muchos de ellos padres que habían dejado a sus hijos con familiares, mostraron una admirable determinación de llegar a la plaza comercial. A su llegada, fueron recibidos por las últimas notas de un Harpieus interpretado por Jansky, formado por Laia Malo y Jaume Reus, quien sirvió como preludio de una noche llena de creación artística.
Una experiencia multisensorial
El festival continuó con la actuación de Palpar, una propuesta innovadora basada en el poemario ‘La Nit Oviparous’ de Maria Sevilla. Acompañado por dos músicos que manipularon instrumentos no convencionales, el poeta cautivó a la audiencia con un estilo dinámico de recitación que recuerda a los golpes de poesía, abordando temas profundos como el cuerpo y la identidad.
El regreso de los suecos
Uno de los momentos más esperados de la noche fue el concierto sueco, que marcó su regreso después de un largo período de silencio. Su actuación fue un espectáculo real, con una audiencia determinada que cantaba cada carta con pasión. La emoción era palpable, y fuera del espacio, se formó una larga cola, esperando la oportunidad de vivir la experiencia.
Una oportunidad perdida
Sin embargo, no todo fue fácil. Muchos de los jóvenes que habían hecho el viaje desde Commerce Street cumplieron con la decepción de que no pudieron entrar para ver la actuación de remedio de Ca La Fresca. A pesar del aumento en la cola, la lluvia respetaba la noche, ofreciendo una noche única a esta generación en busca de su espacio.
Reflexiones sobre el futuro de la poesía
El Festival de Poesía de Barcelona ha demostrado que la poesía puede ser un poderoso motor de conexión, especialmente entre las generaciones más jóvenes. Con un formato innovador y una programación atractiva, está claro que la relación entre la música y la palabra continúa evolucionando, abriendo nuevos caminos para la expresión artística en el futuro.