Un almacenamiento temporal para desechos radiactivos
El Ministerio de Transición Ecológica ha comenzado un proceso de consulta pública sobre la creación de un almacén temporal individual (MTI) en la planta nuclear de Vandellòs I.
Historia de la planta: un accidente que cambia el curso
Cerrado desde 1989 debido a un incidente grave, el Vandellòs nuclear y ha sido un tema de debate durante décadas. El BOE ha publicado recientemente información sobre el estudio de impacto ambiental que acompaña a la propuesta de Enresa, la compañía responsable de administrar los desechos radiactivos, lo que espera que el almacén esté operativo en 2027.
Aspectos financieros y logísticos
Los desechos generados por el desmantelamiento, así como los cuatro contenedores de combustible gastados actualmente en Francia, se almacenarán en esta nueva instalación. La demora en la devolución de estos contenedores ha costado un costo anual de 30 millones de euros para Enresa.
Procedimientos y plazos
Enresa ha comenzado los procedimientos necesarios para obtener el permiso de impacto ambiental y la aprobación del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN). Las partes interesadas tendrán un período de treinta días para presentar acusaciones al proyecto.
Detalles del proyecto de almacén
El nuevo Vandellòs MTI e incluirá tres edificios, uno de los cuales será grande y construirá concreto armado. Los otros dos edificios se utilizarán para facilitar el proceso de almacenamiento. Se espera que estas instalaciones sean más pequeñas que las de las plantas Ascó y Vandellòs II, que están diseñadas para administrar un mayor número de contenedores.
Futuro de desmantelamiento
Se espera que la planta de Vandellòs termine su fase de latencia para 2030, cuando se puede iniciar el tercer y último nivel de desmantelamiento. El Reyract Fire de 1989, uno de los más graves en España, marcó un antes y después en la gestión de esta instalación.
Un Model a Seguir?
Para gestionar eficientemente los desechos nucleares, el gobierno español ha decidido construir almacenes temporales individualizados en cada planta nuclear, en lugar de un almacén centralizado. Esta decisión, basada en el Séptimo Plan de Residuos Radioactivos del Estado, busca una solución más adaptada a las necesidades de cada instalación.
Tiempo de ejecución y expectativas
Trabajar en el almacén de Vandellòs y tendrá un período de dieciocho meses, seguido de un mes de evidencia. Además, se espera que las instalaciones de Ascó y Vandellòs II operen entre 2026 y 2027, coincidiendo con la inminente necesidad de almacenar combustible gastado.
El camino a seguir
Con los nuevos almacenes, busca garantizar la continuidad de las operaciones de recarga de combustible en el futuro, garantizando así la seguridad y la sostenibilidad del sector nuclear español. La gestión de residuos nucleares sigue siendo un desafío que requiere soluciones innovadoras y eficientes.