Recordando a los monos de la vieja
Avanzando entre viejos álbumes de fotos, encuentro una imagen que evoca los recuerdos de mi infancia, con dos monos rollos que adornan mis brazos. En ese momento, entre inocencia y una alegría tímida, celebró la Florida de Pascua. Ahora, me sorprende ver cómo estas tradiciones han evolucionado durante cincuenta años, desde ser una memoria simple hasta una nueva forma de celebrar.
El surgimiento de los huevos de chocolate
En el pasado, los huevos de chocolate, que consideramos hoy como esenciales en la Mona, eran un escaso lujo, presente solo en las mesas de algunas familias ricas o en las exhibiciones de pastelería más exclusivas. Fue con el renacimiento de las tradiciones catalanas, en un momento de optimismo político, cuando los monos comenzaron a incorporar huevos en una cantidad proporcional a la edad de la relleno, simbolizando una unión más profunda entre los padrinos y los niños.
La revolución de la masa posterior a la guerra
Durante el período de la posguerra, Catalan Bakery se sometió a una transformación significativa, posiblemente influenciada por ayuda internacional como el Plan Marshall. Así es como nací lo que llamo la ‘Mona del siglo XX’, un pastel que amalgamó el estilo europeo con nuestra tradición local. Un cilindro de pastel, cubierto de crema de masa y adornado con almendras laminadas, se convirtió en el regalo favorito de los padrinos, acompañados de coloridos columnas y cerezas confitadas.
Un huevo de xocolate con simbolismo
La pastelería, tal vez en un intento de rendir homenaje a las raíces tradicionales o simplemente para justificar un precio más alto, comenzó a colocar un huevo de chocolate en el centro de cada mono. Este huevo, variable de tamaño, se convirtió en un indicador del estado económico del padrino, y pronto otras figuras de chocolate, como gallos y conejos, aparecieron su aparición.
El impacto de la modernidad en la tradición
Con la entrada de Cataluña en un proceso de modernización y europeización, la Mona experimentó una nueva etapa. El pastel que alguna vez fue la base de la celebración comenzó a disminuir en importancia, convirtiéndose en un simple apoyo para figuras de chocolate cada vez más extravagantes. Esta tendencia reflejó una clara división entre aquellos que tenían recursos y aquellos que buscaron seguir el Ritornell de la tradición.
El desvío de las tradiciones
La tradición de Pasqual comenzó a verse afectada por la influencia de la cultura pop y las marcas como Disney, que transformó la esencia de la celebración en una ostentación comercial. En lugar de mantener vivo el círculo tradicional con tantos huevos como el receptor, la Mona se ha convertido en un producto de más consumo, alejándose de su significado original.
Reflexiones sobre el futuro de Mona
A medida que retrocedemos en el tiempo, queda claro que las tradiciones evolucionan, pero es vital que no olvidemos su significado profundo. El Mona, más que un simple dulce, es un símbolo de conexión familiar y cultural que merece ser preservado y reinterpretado, sin perder de vista sus raíces.