La princesa de Gales sale de su convalecencia después de una operación abdominal
La monarquía británica respira aliviada tras ver la primera imagen de la princesa Kate Middleton desde que se sometió a una intervención quirúrgica en enero. La futura reina de Inglaterra fue fotografiada en un coche junto a su madre, mientras circulaban cerca del castillo de Windsor, donde residen los príncipes de Gales.
Su aparición pone fin a las especulaciones y rumores que se habían generado en las redes sociales y en los medios de comunicación sobre su estado de salud. El Palacio de Kensington informó en enero que la princesa Kate había pasado por una cirugía abdominal y que necesitaba un período de recuperación, pero no dio más detalles. Esto provocó la inquietud de muchos ciudadanos de Reino Unido, que la consideran un símbolo de la renovación de la corona.
La monarquía británica, en crisis
La reaparición de la princesa Kate llega en un momento delicado para la monarquía británica, que ha tenido que afrontar varios problemas en los últimos meses. Uno de los más graves ha sido la enfermedad del rey Carlos de Inglaterra, que sufre un cáncer y se encuentra retirado de la vida pública en la residencia de Sandringham. Su hijo, el príncipe Guillermo, ha asumido sus funciones como jefe de estado.
Además, la monarquía británica ha tenido que hacer frente a las polémicas derivadas de la salida del príncipe Harry y su esposa Meghan Markle de la familia real, así como a las acusaciones de pederastia contra el príncipe Andrés, hijo de la reina Isabel II . Todos estos escándalos han mermado la popularidad de la institución, que busca recuperar la confianza de sus súbditos.