El base catalán Ricky Rubio ha anunciado que se incorporará a los entrenamientos del Barça de baloncesto a partir de hoy mismo, sin compromiso alguno y con el objetivo de completar su recuperación física y mental. El jugador, que dejó la NBA hace unas semanas, ha pedido al club azulgrana su colaboración para ponerse a punto para un futuro regreso a las competiciones.
Un regreso a casa para recuperarse
Ricky Rubio comunicó el pasado 4 de enero que daba por finalizada su etapa a la NBA, después de desvincularse de los Cleveland Cavaliers, el equipo en el que jugaba desde la pasada temporada. El base explicó que necesitaba realizar un paréntesis en su carrera profesional para cuidar su salud mental, después de sufrir dos graves lesiones de rodilla y vivir una situación personal complicada.
Desde entonces, el jugador de El Masnou ha estado trabajando en su recuperación, tanto física como emocional, y ahora ha decidido que es el momento de entrar en la fase final del proceso. Por eso, ha solicitado al Barça, su antiguo equipo, la posibilidad de entrenarse con el primer equipo, con el que ganó la Euroliga de 2010, entre otros títulos.
En un comunicado, Ricky Rubio ha expresado su agradecimiento al club azulgrana por su ayuda y comprensión, y ha asegurado que se encuentra con ganas y fuerzas de ver cómo reacciona con un balón en sus manos. De momento, el base sólo participará en los entrenamientos, sin intención alguna de jugar partidos oficiales con el Barça, al menos de momento.
Un palmarés impresionante
Ricky Rubio debutó con el Joventut de Badalona en la ACB con sólo 14 años, convirtiéndose en el jugador más joven en hacerlo. Después de tres temporadas con la Penya, fichó por el Barça, donde jugó dos años más, antes de irse a la NBA. Con el conjunto azulgrana, logró seis títulos: dos Supercopas, dos Copas del Rey, una Liga ACB y una Euroliga, la segunda de la historia del club.
En la NBA, Ricky Rubio jugó 12 temporadas, repartidas entre Minnesota Timberwolves, Utah Jazz, Phoenix Suns y Cleveland Cavaliers. En total, disputó 712 partidos, con unos promedios de 10,8 puntos, 4,3 rebotes, 7,6 asistencias y 1,9 robos por partido. Su mejor año fue en 2018-19, cuando llegó a las semifinales de conferencia con los Jazz.
Con la selección española, Ricky Rubio fue uno de los jugadores más destacados de su generación, ganando siete medallas en competiciones internacionales. Su primera fue la plata en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, donde debutó con la selección absoluta. Luego ganó dos oros europeos (2009 y 2011), un oro mundial (2019), donde fue elegido MVP, una plata olímpica (2012) y dos bronces, un europeo (2017) y un olímpico (2016).
Ahora, Ricky Rubio espera poder volver a disfrutar del baloncesto con el Barça, el equipo que le vio crecer y triunfar. El jugador ha recibido el apoyo y el respeto de todo el mundo del deporte, demostrando su fortaleza y su compromiso con su salud y su bienestar.