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Reforma Necesaria: Equidad en las Pensiones Andorranas

by PREMIUM.CAT
Según datos de la Caja Andorrana de Seguridad Social, a octubre de 2024, 4.194 jubilados tienen en común haber cotizado por vejez durante 35 o más años, periodo de tiempo cotizado, donde la pensión media de jubilación es de 1.468,67 euros mensuales. Esto no quiere decir que todos y cada uno de ellos perciban una pensión de jubilación de 1.468,67 euros mensuales. Es obvio que unos perciben una cantidad igual o superior y otros una cantidad inferior, en función de los puntos de vejez acumulados hasta la jubilación. Lamentablemente,(8k, best quality, masterpiece, highly detailed:1.1)

La realidad de las pensiones en Andorra

Recientemente, la Caixa Andorrana de Seguridad Social ha revelado que en octubre de 2024 un total de 4.194 jubilados han contribuido durante al menos 35 años al sistema. La pensión media de estos pensionistas se sitúa en 1.468,67 euros mensuales, pero debe entenderse que este importe no es homogéneo. Las cantidades percibidas varían considerablemente, dependiendo de los años de cotización y de los puntos acumulados.

Desigualdades en el sistema de pensiones

Es alarmante que un número considerable de jubilados con larga trayectoria laboral estén recibiendo pensiones inferiores al salario mínimo, que actualmente es de 1.431 euros al mes. Esta situación es un reflejo de una injusticia sistémica que genera un sentimiento de agravio comparativo entre aquellos que han aportado durante décadas y quienes acceden a pensiones no contributivas.

Injusticias Comparativas

Lamentablemente, quienes han realizado pocas aportaciones al sistema pueden acceder a pensiones de solidaridad que igualan o incluso superan las pensiones contributivas de individuos que han cotizado durante 35 o 40 años. Esto genera una disparidad que no puede ignorarse, especialmente cuando se considera que las pensiones no contributivas pueden llegar a ser hasta tres veces superiores a las contributivas.

Propuestas para una Solución Justa

A fin de corregir esta desigualdad, se propone establecer un mínimo de pensión para las pensiones contributivas que sea equivalente al salario mínimo, similar al que se aplica a las pensiones no contributivas. Esta medida debería estar condicionada a haber cotizado al menos 40 años ya no haber optado por la jubilación anticipada.

Un Compromiso Necesario

Además, sería fundamental que el Gobierno de Andorra implementara un complemento para las pensiones de jubilación de la CASS, que compensara las reducciones que muchos asegurados experimentan a causa de coeficientes correctores. Esto no sólo sería un acto de justicia, sino también una forma de restituir los fondos que la CASS ha invertido en pensiones no contributivas durante años.

El Impacto Económico y Social de este Cambio

Implementar estas medidas no debería suponer una carga insostenible para el presupuesto estatal, cuya estimación ronda el 0,50% del total. Las personas que más se ven afectadas por esta desigualdad suelen ser mujeres con bajos salarios, que ahora se encuentran con pensiones insuficientes para afrontar el coste de la vida.

El Camino hacia la Solidaridad

Es hora de poner fin a las desigualdades que han marcado las trayectorias laborales de muchas personas y que siguen afectando a sus vidas en la jubilación. La solidaridad debe ser un principio fundamental en el sistema de pensiones, tanto entre generaciones como entre aquellos que han contribuido de forma significativa.

Acciones a Realizar

Para abordar este agravio, pueden considerarse varias acciones: A) Presentar el tema ante los representantes en el Consejo General. B) Iniciar una iniciativa legislativa popular. C) Recurrir a la vía judicial para hacer valer los derechos de los pensionistas. D) Elevar una queja al Razonador del Ciudadano.

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