La Consejera de Economía carga contra los comunes
La consellera de Economía, Natàlia Mas Guix, ha abierto el debate parlamentario de este miércoles, que votará las enmiendas a la totalidad de los presupuestos de la Generalitat de 2024, cargando contra los comunes por su ‘no’ en las cuentas y les ha acusado de «incoherencia y electoralismo» porque «hoy no se vota nada sobre un casino».
Mas Guix ha reprochado a los comunes que hayan decidido «ignorar» que las cuentas no incluyen ninguna partida para el macroproyecto del Hard Rock. Insistió en que no hay ni un euro destinado, un argumento que el ejecutivo de Pere Aragonès ha ido repitiendo en las últimas semanas.
Los comunes y el proyecto del macrocasino de Vila-seca
La titular de Economía ha recordado que los comunes han «ignorado» que en 2022 ya votaron unos presupuestos que sí tenían una partida para el proyecto del macrocasino de Vila-seca, de 120 millones de euros concretos para el Hard Rock, la piedra en el zapato que aleja un acuerdo entre el ejecutivo y comunes por las cuentas.
Por otro lado, Mas Guix ha advertido que «pasarán muchos años» hasta que Cataluña no pueda volver a disponer de un crecimiento como el que se prevé en los presupuestos de este año.
Impacto del rechazo a las cuentas
La consellera reiteró que rechazar hoy las cuentas supone decir ‘no’ a las reivindicaciones de los profesionales sanitarios, docentes y personal penitenciario. Ha destacado que los presupuestos «crecen en más de 3.200 millones» e incorporan partidas para combatir la sequía, recursos para educación, vivienda, investigación e innovación.
Acuerdo entre comunes y el Gobierno
A estas alturas el acuerdo entre comunes y el Govern es casi imposible después de que el grupo de Jéssica Albiach haya rechazado la oferta in-extremis que le ha trasladado el ejecutivo. Fuentes de los comunes dejan claro que reclaman a Pere Aragonès un posicionamiento público sobre que el Hard Rock no se hará.
El Gobierno les ha trasladado que ellos no dirán «nunca que el Hard Rock se hará» porque «no quieren «asumir el riesgo» que conlleva con el PSC y los inversores. Las mismas fuentes insisten en que la “clave” de todo es que Aragonés se comprometa a detener la tramitación del Plan Director Urbanístico (PDU) del Hard Rock.