La gestión de la consejera de Justicia en cuestión
La consejera de Justicia, Gemma Ubasart, ha manifestado hoy en el Parlament que el recluso que recientemente estuvo implicado en un trágico incidente en la cárcel de Mas de Enric, en el Catllar, había experimentado una evolución positiva inesperada. Sin embargo, incidentes pasados ponían de manifiesto signos de comportamiento agresivo.
Antecedentes del recluso
En el pasado, el recluso fue sancionado por agresiones y no mostraba interés en programas de reinserción social. Su falta de raíces familiares o sociales en el exterior de la cárcel dificultaba su progreso de grado.
Medidas de prevención
La consellera ha expresado su determinación al implantar medidas para evitar incidentes similares en el futuro. No se han dado detalles sobre los detalles del incidente en la cocina de prisión.
Reincidencia y comportamiento del recluso
Tras el trágico evento, el individuo se suicidó. Pese a un historial de comportamiento mayoritariamente positivo, episodios de agresión puntuales surgieron, especialmente durante el inicio de la pandemia.
Reacciones a la situación
El personal penitenciario ha expresado su descontento con la gestión de la situación, pidiendo responsabilidades y dimisiones. Las protestas han tenido lugar en las puertas del Parlament de Catalunya.
Reacciones sindicales
Sindicatos como UGT prisiones han exigido acciones concretas ante la falta de respuesta inmediata al incidente. Las demandas de dimisión se han hecho presentes de forma contundente.
Demanda de cambios
Los sindicatos reclaman una respuesta efectiva para garantizar un entorno seguro y pacífico dentro de las cárceles. La importancia de tomar medidas concretas frente a situaciones críticas es destacada.
Negociaciones futuras
Los sindicatos han dejado claro que no van a ceder hasta que se tomen acciones responsables ante la situación. La posibilidad de diálogo está abierta, pero se exigen cambios inmediatos.