El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha pedido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que cambie su enfoque en relación al caso Koldo.
En un discurso en Bilbao, donde se encontraba para apoyar la candidatura de Javier de Andrés como lehendakari, Feijóo ha criticado duramente a Sánchez, acusándolo de encubrir una presunta trama de corrupción relacionada con la adjudicación de contratos para la venta de mascarillas durante la pandemia.
Feijóo exige transparencia y claridad
Feijóo ha insistido en que los ciudadanos tienen derecho a conocer la verdad y ha pedido a Sánchez que aclare lo sucedido tanto en el ámbito gubernamental como dentro del partido. Además, ha señalado que si no hay nada que ocultar, el presidente del Gobierno debería ofrecer explicaciones de forma inmediata.
Críticas a la gestión de Sánchez
El líder del PP ha criticado duramente la gestión de Sánchez, acusándolo de liderar un gobierno en descomposición y falto de credibilidad. Según Feijóo, el presidente ha construido su carrera política sobre un entramado de mentiras y ocultaciones.
La respuesta del Gobierno y la falta de colaboración con la justicia
Feijóo también ha lamentado la falta de colaboración del Gobierno con la justicia y ha criticado la estrategia de encubrimiento adoptada por algunos miembros del ejecutivo. Ha enfatizado la importancia de asumir responsabilidades políticas y mantener la integridad institucional en tiempos de crisis.
Advertencia sobre las consecuencias de un liderazgo débil
Feijóo ha advertido sobre las posibles consecuencias de mantener un liderazgo débil y dividido en el contexto político actual. Ha destacado que cada hora surgen nuevas revelaciones en torno al caso Koldo y ha señalado que es imposible seguir todo lo que está ocurriendo en el PSOE, en el Gobierno ‘sanchista’ y en la presidencia del Gobierno en Moncloa.
Feijóo insiste en la necesidad de dar explicaciones
Feijóo ha reiterado que Sánchez y los socialistas conocían el caso Koldo desde hace tiempo y lo encubrieron. Ha criticado la reacción del Gobierno, calificándola de temeraria y absurda, y ha instado a que se dé la cara en lugar de tratar de tapar una trama desbocada.
