El delegado de la Oficina Técnica del R3 alerta de que es una línea «estratégica» y que es necesario actualizarla
Manlleu, | La Oficina Técnica de la R3, que representa los intereses del territorio en relación a la línea ferroviaria, ha expresado su «inquietud» por el traspaso de Cercanías pactado entre el gobierno español y el catalán. Así lo ha manifestado su delegado, Josep Arimany, en su comparecencia ante la Comisión de Territorio del Parlament este miércoles. «¿Nos preocupa el traspaso? Sí, nos preocupa. Queremos que Madrid no deje a un lado los compromisos de inversión que había asumido hasta ahora», ha dicho. Según Arimany, la Generalitat también «debe tener claro lo que quiere por la línea», destacando que es un eje internacional antiguo que necesita una puesta al día. Durante su intervención, ha solicitado el apoyo de todos los grupos políticos para «impulsar un proyecto de país» y que «no se haga delgado» con los recursos porque «es una línea estratégica».
La Oficina Técnica del R3 nació en 2021 con el consenso del territorio
Arimany ha explicado a los diputados los principales aspectos recogidos en el informe que presentó a finales de 2022, donde se detallan las necesidades y propuestas de mejora de la línea. Ha recordado que la Oficina Técnica surgió en 2021 en Vic con la participación de entidades como el Consejo Comarcal de Osona, la Cámara de Comercio de Osona, la UVic-UCC y agentes sociales como la plataforma de usuarios Porque no nos peguen el tren. «Es una línea internacional muy antigua», del siglo XIX, que sufrió una «situación muy crítica» por la falta de inversión durante años, ha señalado. Arimany también reclamó que se mejore la comunicación con los municipios sobre las diferentes incidencias para poder ofrecer un mejor servicio a los ciudadanos.
