Un cambio de rumbo para salvar la corona
Juan Carlos ha provocado un gran desgaste en la institución monárquica debido a sus comportamientos controvertidos y el caso Nóos, que implicó a Iñaki Urdangarin ya la infanta Cristina. Esta situación generó una desconfianza generalizada en la ciudadanía y puso en jaque la continuidad de la monarquía española. Ante esta crisis, Felipe y Letizia se vieron obligados a tomar las riendas para intentar evitar el desastre inminente.
Una nueva estrategia para desvincularse del pasado
La primera medida fue forzar la abdicación de Juan Carlos, y unos años más tarde se exilió a los Emiratos Árabes, una humillación pública sin precedentes para un monarca. Esta decisión tenía como objetivo desvincularse completamente del pasado, incluyendo incluso el apellido Borbón. Esta estrategia ha tenido un notable éxito, especialmente en el caso de la princesa Leonor, representante de la corona mejor valorada por la ciudadanía, seguida de Felipe VI.
Distanciamiento total
La distancia entre Juan Carlos y la nueva generación de la monarquía española es evidente. La última fotografía que se tiene del abuelo y la nieta data del 2019, y aunque públicamente se han reencontrado en ocasiones como el cumpleaños de la princesa, se han evitado las imágenes del interior. Además, a Juan Carlos no se le permitió asistir a la jura de la constitución, y se marchó a Londres con su avión privado a medianoche, todo ello evidencia un distanciamiento total.
Un futuro lejano
No se prevé que Juan Carlos vuelva a España en un futuro cercano, principalmente debido a su edad avanzada y problemas de movilidad. Se plantea la posibilidad de que se instale en otra ciudad o incluso en otro país cercano, como Portugal, Francia o Suiza, ya que esto beneficiaría a su patrimonio.
Relación con las limpias
Juan Carlos siempre ha querido pasar tiempo con sus nietas, Leonor y Sofía, pero ha recibido negativas por parte de sus padres. Sin embargo, mantiene el contacto con ellas y les ofrece la posibilidad de visitarlo en Abu Dhabi, aunque estas visitas se mantienen en secreto.
Un nuevo comienzo
La monarquía española está encarando una nueva era, desvinculándose del pasado y buscando establecer una renovada imagen. El distanciamiento de Juan Carlos y la consolidación de la figura de la princesa Leonor son muestras de ese cambio de rumbo que busca garantizar la continuidad de la institución.
