Políticos que no admiten críticas
Hay políticos que no saben encajar las críticas y algunos no admiten que se les cuestione su gestión. Los políticos se enfadan cuando los ciudadanos/as nos quejamos aunque no son quejas imaginadas, son quejas razonadas y tangibles. Frecuentemente, los ciudadanos/as nos enteramos de las tropelías políticas a través de los medios de comunicación. Tal y como dice aquella expresión aplicada a la política «de la misa no sabemos ni la mitad». La mitad la sabemos gracias al periodismo y la otra mitad no la sabemos porque a los políticos no les conviene que la sepamos.
Sobrecoste en proyectos municipales
El pasado mes de febrero la candidatura municipal «Fem Manresa» denunciaba que el presupuesto inicial del Museo del Barroco en Manresa aprobado por el gobierno municipal era de 5.452.274 euros (aportación del Ayuntamiento y ayudas de otras administraciones) y que la cifra se había incrementado hasta los 9,8 millones de euros. ¡Ondia! si los números son ciertos, equivale a un 80% de incremento entre el presupuesto inicial y el coste final.
El pasado 25 de junio la página 5 de este diario la encabezaba este titular: «La parte hecha de la nueva avenida vale 8,4 millones, el 53% más de lo previsto». Se refería a la parte de la avenida de los Països Catalans que enlaza el sector de los Trullols con la carrerita de Vic en Manresa. El alcalde manresano justificaba el sobrecoste argumentando que en el proyecto había «cosas» que no se habían contemplado e «imprevistos» que no se sabían por qué motivos se modificó el proyecto. El alcalde puntualizaba que la Generalitat aportó un 60% de la financiación y el Ayuntamiento un 40%.
Sobrecostes futuros
Ya podemos empezar a temblar con los sobrecostes que seguro habrá (que nadie lo dude) cuando finalice la obra de la nueva sede de la Generalitat en los antiguos juzgados de Manresa y otros proyectos en perspectiva como son el soterramiento de la línea de los FGC con la nueva estación bajo la plaza Espanya y la rehabilitación de la Fábrica Nueva. Aunque la Generalitat vierte el saco hay que recordar que las obras se ejecutarán con dinero público y, por tanto, de nuestros impuestos.
Necesidades no resueltas
Por cierto, el pasado 26 de junio en la página de deportes de este diario se informaba del homenaje del Ayuntamiento de Manresa al Club Patí y al Covisa de fútbol sala. Un reconocimiento muy merecido tanto por la gran temporada deportiva realizada como por el gran trabajo formativo que efectúan. Ambos clubs comparten el pabellón municipal de Pujolet y debido a los diversos equipos que tienen se les hace muy difícil poder combinar los horarios de entrenamiento y las competiciones deportivas.
En el acto de homenaje el alcalde admitió la necesidad que tiene Manresa de un nuevo pabellón deportivo, pero que éste no es factible a corto plazo, ya que tiene un coste de 5 millones de euros. Mira por dónde, con los sobrecostes provocados por la negligencia política («cosas», «imprevistos»…) podrían resolverse unas cuantas necesidades.
Con el sobrecoste de la urbanización de la avenida de los Països Catalans podría construirse el nuevo pabellón deportivo. Con el sobrecoste de las obras del Museo del Barroco podrían iniciarse los cimientos de la residencia geriátrica pública que Manresa necesita con urgencia, y con el sobrecoste que habrá en el nuevo edificio de la Generalitat seguro que la residencia ya podría inaugurarse .
