El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha comunicado este martes por la mañana una serie de cambios en el ejecutivo catalán para encarar el último año de legislatura. El más relevante es que la hasta ahora consejera de presidencia, Laura Vilagrà, se convertirá en la nueva vicepresidenta del gobierno catalán. Tras el anuncio del líder del ejecutivo, la oposición ha reaccionado con dureza contra los últimos movimientos de Aragonès. Por su parte, el primer secretario del PSC, Salvador Isla, ha exigido al máximo responsable del Gobierno que «gobierne» durante el último año y no se dedique a preparar su candidatura para las elecciones del año próximo.
Unos cambios con intención electoral, según la oposición
En este sentido, el vicepresidente y portavoz de Junts per Catalunya, Josep Rius, advierte que los movimientos de Aragonès «se tienen que interpretar en clave electoral»: «Son ajustes estéticos que se tienen que interpretar en clave electoral para intentar remontar a la desesperada», sostiene el portavoz del partido a través de una publicación en Twitter, ahora conocido como X. Ríos opina que la reorganización del equipo de gobierno de Cataluña «no aporta nada en cuanto a la mejora de la gestión del gobierno en un momento en que hay prioridades como la sequía o la enseñanza». Un planteamiento muy parecido al que ha expresado la líder de los comunes en el Parlamento, Jéssica Albiach, que considera que hay problemáticas que hay que priorizar antes de hacer un cambio de rostros en el ejecutivo: «Los problemas de Cataluña en educación, en sanidad, en renovables… no se resolverán con nuevos cargos, sino trabajando mejor y teniendo modelo de país», afirma Albiach, que, al igual que el resto de formaciones de la oposición, cree que la maniobra de Aragonès tiene un objetivo electoralista.
¿Agotará la legislatura o no?
Mientras que Isla considera que no hay «ningún problema» en que Aragonès agote el último año de legislatura, el presidente de la Generalitat no lo ha confirmado totalmente, a pesar de que sus movimientos indican la voluntad de agotarla. En este sentido, desde la CUP han querido evitar valorar los cambios concretos del gobierno catalán, pero sí que le han reclamado al jefe del ejecutivo catalán que aclare si agotará la legislatura «para hacer qué, y junto a quién». La diputada cupaire Laia Estrada cree que si Aragonès no cambia el rumbo y opta por continuar con las «mismas políticas y desplegar la agenda del PSC y Fomento», lo único que estará haciendo es «desaprovechar la legislatura». En esta misma línea, Estrada ha advertido que si el presidente de la Generalitat no cambia el rumbo, en las próximas elecciones «habrá dos candidatos del PSC».