El dilema del vecindario
En el Casco Antiguo de Logroño, surge un debate sobre el costo de alquilar un trastero en comparación con el de tener una terraza para la hostelería. Los residentes cuestionan el trato discriminatorio que perciben, ya que afirman que alquilar un trastero es más costoso que tener una terraza en esta zona.
Según las quejas, las tasas por una terraza de 30 metros en la calle Bretón de los Herreros, categoría 1, cuestan alrededor de 53 euros, mientras que en la Plaza del Parlamento, categoría 5, el costo es de unos 22 euros. Esto ha llevado a denuncias sobre el incumplimiento de las ordenanzas municipales en relación con las terrazas, exigiendo una revisión inmediata de las mismas.
Incumplimientos y reclamos
La Plataforma Demanda el Casco Antiguo ha destacado los incumplimientos de las ordenanzas por parte de la hostelería, señalando un espíritu de impunidad y depredación en el centro histórico. Se han mencionado ocupaciones indebidas del espacio público, excesos en el uso de mobiliario, ruidos, consumo indebido fuera de las terrazas, entre otros.
Además, se ha comparado el costo de alquilar una terraza con el de un trastero en la zona, resaltando que es más caro para un vecino de Logroño alquilar un trastero que diez mesas para un hostelero. Esta situación ha generado preocupación entre los residentes, quienes consideran que se está permitiendo una ocupación indiscriminada y casi gratuita de la vía pública.
Reclamo por revisión de ordenanzas
La plataforma vecinal reclama una revisión inmediata de la ordenanza municipal de terrazas, exigiendo una drástica reducción de los espacios ocupados por la hostelería. Se destaca la necesidad de garantizar el descanso de los ciudadanos como un derecho fundamental, en lugar de permitir un descontrol en el uso del espacio público.
Proliferación de mesas altas
Otro punto de conflicto es la instalación de mesas altas y barricas en las zonas de chiquiteo del Casco Antiguo. Se ha denunciado que estas mesas, cuyo costo unitario es de 27,9 euros anuales, están obstaculizando el acceso a los portales de los vecinos y violando la normativa que limita su uso exclusivamente a las fachadas de los establecimientos.
Llamado a la revisión de normativas
Ante esta situación, la plataforma vecinal ha reiterado su llamado a una revisión inmediata de la ordenanza municipal de terrazas, solicitando una reducción de los espacios ocupados por la hostelería y una limitación más estricta en el uso de mobiliario en las zonas públicas.
